Desafíos estratégicos de la función pública en 2030
| Autor | Mikel Gorriti Bontigui |
| Páginas | 155-175 |
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CAPÍTULO 6
DESAFÍOS ESTRATÉGICOS
DE LA FUNCIÓN PÚBLICA EN 2030
Mikel Gorriti Bontigui
Responsable de Recursos Humanos. Dirección de Función Pública.
Departamento de Gobernanza Pública y Autogobierno. Gobierno Vasco
1. UTILIDAD PÚBLICA E IGUALDAD
Nadie duda de que la complejidad será creciente en la sociedad por sus
propias dinámicas de crecimiento económico no reflexionado, por el avance
imparable del conocimiento técnico en orden a la solución de problemas, por
el objetivo legítimo de alcanzar mayores cotas de bienestar material y por la
natural curiosidad de conocer la verdad y dominar el medio. Al ser varios
los autores implicados en esta búsqueda se genera necesariamente una com-
petitividad entre organizaciones, de la cual gana aquella que más complejidad
controla y hace más con menos. Los avances tecnológicos, la automatización
y el generalizado uso de la inteligencia artificial son acordes con estos fines.
No está en entredicho, por ahora, una reflexión con relación a si estas metas
son las que a la naturaleza humana satisfacen. En la medida que no lo sean,
y probablemente esta reflexión es necesaria, uno de los últimos refugios de
la ciudadanía son las instituciones públicas. Es su responsabilidad formar en
valores, reclamar la axiología necesaria para comprender y relativizar el
mundo actual y formar también en las herramientas tecnológicas o sus rudi-
mentos pues nunca huir de la complejidad es aconsejable. Es necesario por
tanto que la función pública asuma un compromiso con la sociedad, con toda
ella, con relación a los mimbres con los que relativizar la aparentemente
inevitable complejidad y las herramientas necesarias para conocerla.
Muchos autores hablan de la desigualdad implícita en la revolución tec-
nológica que estamos viviendo (Autor, 2013, 2019; Cowen, 2014; Acemoglu
y Robinson, 2019; Wald, 2020; Susskind, 2020). Un salto de complejidad
que impide el gradiente, hasta ahora natural, desde las profesiones más sim-
ples a las de mayor complejidad. La automatización se realiza sobre procesos
estandarizados rutinarios y de complejidad media. En realidad, todo lo que
CONTINUIDAD VERSUS TRANSFORMACIÓN: ¿QUÉ FUNCIÓN PÚBLICA NECESITA ESPAÑA?
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puede ser estandarizado es susceptible de ser automatizado e introducido en
una máquina para asegurar dicha rutina y para abaratar los costes de dicho
desempeño. Toda rutina es el diseño humano de una repetitividad (Torrejón,
2019). La automatización se realiza, por ahora, en niveles medios de com-
plejidad que estrechan por el centro lo que antes era un gradiente de com-
plejidad piramidal, generando un nuevo gráfico a modo de reloj de arena. Se
produce así una pérdida de competitividad en las complejidades medias,
obligándoles a un descenso en sus destrezas para ser contratados o para
mantener sus puestos (downskilling), generando frustración e imposibilidad
de desarrollo, porque la natural distribución de las aptitudes en las personas
no es así sino normal en el sentido gaussiano. Ante esta realidad, injusta, las
Administraciones públicas (AA. PP.) deben asumir y favorecer el derecho
natural al desarrollo de las personas y posibilitar que todas lo hagan en fun-
ción de sus capacidades y esfuerzos. Matización del lucro por el interés
general. Una labor de metagobernador proactivo, vigilante y no reactivo,
como lo son ahora muchas AA. PP. (Ramió, 2019).
Una de las soluciones populistas y por tanto simples ante el problema de
la complejidad creciente y la tiranía del mérito (Sandel, 2020) es la negación
estratégica de la verdad: la construcción de discursos simples explicativos de
realidades complejas, las cuales se resumen maniqueamente con ingredientes
insuficientes de verdad pero atractivos para los excluidos. Una manipulación
no inocente que relativiza el compromiso con la verdad de todo conocimiento
(Polanyi, 1958) y la exigencia de su probatura con universales fiables y
sostenidos en el tiempo. Las noticias falsas (fake news) y relativizar o negar
la verdad (posverdad) son las dos manifestaciones más frecuentes de esta
manipulación. Es labor de las AA. PP. advertir de estas soluciones exigiendo
la probatura de las verdades enunciadas en la medida que afecten a valores
públicos o al interés general. Objetividad, evidencias basadas en datos y
procesos de argumentación empírica, son objetivos de la función pública para
2030, exigibles a las organizaciones privadas y a la ciudadanía en su relación
con las AA. PP.. Y practicarla ella misma en los desempeños que satisfacen
sus responsabilidades y en las decisiones que afectan a la ciudadanía.
Las AA. PP., por su tamaño, especialización y lentitud de sus procesos
de selección y formación, no van a ser capaces de asumir y satisfacer toda
la complejidad del entorno en el que ejercen sus responsabilidades. Así, va
a ser necesaria e inevitable la colaboración público-privada. Una cogestión
de servicios con condiciones donde dicha colaboración se realice en los tér-
minos instrumentales necesarios y sin dejación de responsabilidades y control
por parte de las AA. PP.. Esta colaboración va a exigir a las AA. PP. una
flexibilidad en su normativa y en los procesos de contratación tal y como
recoge el reciente Real Decreto-ley 36/2020. En estos casos, las AA. PP.
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