Prólogo a la decimotercera edición

AutorAlberto Palomar Olmeda
Páginas13-14
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PRÓLOGO A LA DECIMOTERCERA EDICIÓN
Hace relativamente poco tiempo que vio la luz la edición anterior y, sin
embargo, desde que se acabo la edición hasta ahora no han parado de produ-
cirse cambios. Primero, la Ley 11/2020, de 30 de diciembre, de Presupuestos
Generales del Estado y, posteriormente, el Real Decreto-ley 14/2021, de 6 de
julio, de medidas urgentes para la reducción de la temporalidad en el empleo
público. Se trata dos normas que vienen precedidas de acuerdos con los agen-
tes sociales en el ámbito público y que tratan de aproximar la legislación de
empleo público a otras reformas sustantivas que se están produciendo en el
ámbito laboral y que han sido recogidas en otras normas de este ámbito.
Esto demuestra, en gran medida, que desde la perspectiva del derecho
comunitario se produce una cierta pérdida de los referentes conceptuales que
trataban de diferenciar el empleo público y el privado. Se trata de profundi-
zar en la propia idea que subyace en el ámbito del concepto de «empleado
público» que incluye el personal laboral de las Administraciones Públicas
frente a los conceptos tradicionales de funcionario. Sin embargo, lo que es
evidente es que esta profundización lo que está produciendo, de facto, es una
aproximación del régimen jurídico del empleo público y difuminando las
categorías jurídicas como elemento central del establecimiento de un régi-
men jurídico diferenciado.
Sea como fuere lo que parece que se pone de manifiesto es, de nuevo, un
cierto interés en la regulación del empleo público. En gran medida, el enorme
esfuerzo al que se enfrenta España es la capacidad real de asumir la gestión
de los fondos europeos. Los fondos, al margen de su consideración económi-
ca, son, sobre todo, un enorme esfuerzo de gestión y de procedimientos. Un
reto que exige muchos esfuerzos de adaptación normativa, de imaginación,
pero, también, de refuerzo y consolidación de un modelo de empleo que,
ciertamente, no ha sido una de las prioridades desde ninguna de las perspec-
tivas que se quiera plantear.
La recomposición del empleo exige dinamismo, criterio y planificación,
tres cualidades que no han estado muy presentes en la política de gestión de
los últimos años y que han conllevado a una descapitalización numérica y de

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