Prólogo
| Autor | Pedro González-Trevijano |
| Cargo del Autor | Académico de Número de la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación de España. Magistrado del Tribunal Constitucional.Catedrático de Derecho Constitucional (URJC) |
| Páginas | 11-14 |
PRÓLOGO
Hacer un prólogo es tarea no infrecuente, cuando los años van pasando de
forma inexorable, y se considera que uno disfruta no solo de alguna potestas, sino
también de cierta auctoritas. Aunque en el presente caso, se aúnan dos razones
disímiles a las habituales. En primer lugar, la afinidad académica entre el autor
y el prologuista. Ambos, catedráticos de Derecho constitucional, defensores de la
bondad y la vigencia de los valores que inspiraron la Transición Política, y valedo-
res, por ende, de la síntesis jurídica de aquella: la Carta Magna de 1978. Un régi-
men constitucional erigido sobre unos principios intangibles dignos de impulsar
entonces, y de mantener hoy. A saber, y no son meras expresiones altisonantes
y carentes de virtualidad, la libertad, la justicia, la igualdad y el pluralismo polí-
tico. Pero hay una segunda circunstancia a la que este prologuista, y el autor tam-
poco, no pueden, ni desean escapar: una sincera e ininterrumpida amistad de
más de cuarenta años.
Enrique Arnaldo Alcubilla es uno de los juristas más sobresalientes de su gene-
ración. Disfruta, de forma simultánea, del mejor bagaje teórico, pues, de una parte,
domina con rigor y soltura los conceptos técnico-jurídicos, al tiempo que goza de
una larga y contrastada experiencia práctica en la curia. Convencido, como afir-
maba Arangio Ruiz, de que el Derecho ha de saber acomodarse de forma prescrip-
tiva, si no desea correr el riesgo de incumplimiento o de desuetudo, a las singulares
circunstancias de cada tiempo, negocio o relación. Una máxima que es predica-
ble, como en el ejemplar Derecho romano, tanto para las relaciones de carácter
privado, como en las de naturaleza pública. A la postre, Derecho privado y Dere-
cho público son las dos caras hermanadas de la misma realidad.
No hay ámbitos materiales ontológicamente diferentes, y menos aún con-
tradictorios y antitéticos, ante las dos dimensiones del ordenamiento. Las situa-
ciones jurídicas, públicas o privadas, no son categorías aisladas, y menos aún
impermeables. Los distintos trabajos y artículos que integran el presente libro
explicitan, aunque sus inquietudes se centren mayoritariamente en las de índole
más pública, la ligada connivencia de las normas, sean privadas o públicas, en
todo sistema jurídico.
El autor es catedrático, adelantábamos, de Derecho constitucional, miembro
del prestigioso cuerpo de Letrados de las Cortes Generales y Técnico de la Admi-
nistración del Estado. Cualificación sobrada para abordar con solvencia, como el
lector descubrirá de manera inmediata, las relevantes cuestiones que desgrana con
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