Capítulo 19. Cortes y tribunales internacionales en materia electoral, contexto histórico
| Autor | Ricardo Andrade Ureña y Esteban Ron Castro |
| Cargo del Autor | Universidad de Salamanca / UISEK |
| Páginas | 308-328 |
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CAPÍTULO 19
CORTES Y TRIBUNALES INTERNACIONALES
EN MATERIA ELECTORAL, CONTEXTO HISTÓRICO
RICARDO ANDRADE UREÑA
Universidad de Salamanca
ESTEBAN RON CASTRO
UISEK
1. INTRODUCCIÓN
Desde una perspectiva histórica, el derecho internacional, la creación y
existencia de cortes y tribunales internacionales, obedecen a la necesi-
dad de crear una comunidad jurídica ampliada, con el objetivo de unifi-
car la aplicación de las fuentes del derecho, y por ende el fortalecimiento
de la democracia en un estado de derechos y justicia. No obstante, el
camino recorrido para su existencia, implica un esfuerzo mancomunado
y exhaustivo de las naciones, en el sentido de otorgar herramientas de-
mocráticas válidas, y ejercicios de democracia materiales. Partiendo de
lo indicado, y realizando una prelación entre los hechos más relevantes
que han servido para el fortalecimiento de la democracia, y de los prin-
cipales actos convencionales generados en función del fortalecimiento
del sistema, tenemos:
La resolución 1080, o también llamada el “Compromiso de Santiago”,
se constituyó como un instrumento para la defensa de la democracia en
la región durante la última década, a través de la intervención de la OEA,
quien a través del cumplimiento de sus objetivos fundamentales de for-
talecer, promover, dinamizar y consolidar la democracia representativa,
directa y comunitaria, estableció parámetros comunes para que los me-
canismos de democracia pasen de lo formal a lo material. El contexto de
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dicho compromiso, se desenvolvió alrededor de la Guerra Fría y la caída
del Muro de Berlín.111
De eso, las primeras grandes expresiones de que un nuevo orden se daría
en el Hemisferio fueron la resolución antes citada, también denominada
“Democracia Representativa”, y el “Compromiso de Santiago con la De-
mocracia y la Renovación del Sistema Interamericano”, aprobados por
la Asamblea General de la OEA en sus sesiones ordinarias de 1991, que
sirvieron como fundamento primordial para evitar el retorno de las dic-
taduras militares. Dicha resolución, permitió la consolidación de la
cooperación de los estados latinoamericanos, a través de la erradicación
de las guerras, el fortalecimiento de una cultura de paz, el estableci-
miento de políticas y normas comunes que permitan el robustecimiento
del poder ciudadano; y, la denominada solidaridad democrática, la
misma que se vio plasmada principalmente con la discusión del Proto-
colo de Cartagena de Indias de 1985. 112
Dichos instrumentos giraron alrededor de generar una cultura de paz,
pasando el sistema de gobierno a un segundo plano, es decir, buscaban
evitar las guerras en la región, sin preocuparse del sistema de gobierno
que se pretendía establecer, por tanto el retorno de la democracia, era un
factor adicional a la paz de los pueblos.
En ese contexto, “(…) Sus fundamentos integraron a la Carta el con-
cepto de democracia representativa y elevaron su promoción y defensa
al rango de propósitos esenciales de la OEA. La resolución 1080 facul-
taba al Secretario General de la Organización para convocar al Consejo
Permanente o a la Asamblea General de forma inmediata, cuando se
produjesen interrupciones abruptas o irregulares “del proceso político
institucional democrático o del legítimo ejercicio del poder por un go-
bierno democráticamente electo” y tomar acciones dentro del marco de
111 Organization of American States, Asamblea General, "Carta Democrática Interamericana
Documentos e Interpretaciones (Washington, D.C: OAS Cataloging-in-Publication Data Carta,
2003); Organización de los Estados Americanos, “Compromiso de Santiago Con La
Democracia y La Renovación Del Sistema Interamericano [OEA/Ser.P/XXI.O.2].”
112 Dante Mauricio Negro-Alvarado, “La Democracia En El Sistema Interamericano: Una
Aproximación a La Carta Democrática Interamericana a Dieciséis Años de Su Adopción,”
Derecho y Sociedad, no. 50 (2018): 277–93.
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