La prueba de los actos internos y sus límites

AutorJulio Ortiz Herráiz
Páginas51-60
51
II. LA PRUEBA DE LOS ACTOS INTERNOS
Y SUS LÍMITES
Cuando se pretende estudiar los llamados actos internos de la persona a
la hora de evaluar la notable divergencia de la voluntad querida y la externa-
mente manifestada, son necesarias un conjunto de pruebas a través de las que
se pueda descubrir la voluntad real del simulante, en la que subyace la ocul-
tación o el engaño y crea una apariencia jurídica para conseguir unos fines
determinados.
Para comprender mejor la relación entre la voluntad interna y la manifes-
tada es preciso examinar el proceso volitivo interno del consentimiento, el sig-
nificado del acto de la voluntad con la diferencia existente entre la voluntad
natural (voluntas ut natura), de la que nace la voluntad virtual, en el sentido de
que se puso internamente, no se revocó y sigue influyendo en el consentimien-
to verdadero (interno y real); y la voluntad electiva (la voluntas ut ratio), que no
es una potencia distinta de la voluntad natural, sino su continuación y que es
actual, manifestándose expresamente al término normal del proceso volitivo.
Se caracteriza, en primer lugar, por ser ilustrada con el conocimiento teórico
de los bienes del matrimonio, el cual corre a cargo de la llamada razón práctica.
Permítaseme referirme al análisis que hace Santo Tomás de Aquino del
acto voluntario. Distingue tres actos de la voluntad con respecto al fin y tres
actos con respecto a los medios. Los primeros son: el velle, la intentio y la fruitio
(querer, intención y fruición). Los segundos son: la electio, el consensus y el usus
(elección, consentimiento y uso) 37.
El acto voluntario humano empieza con la elección de los medios. El pri-
mero es el consentimiento, pues consiente en aceptar algo como bueno en el
interior del hombre. Algo, o alguien, es deseable, amable, digno de ser queri-
do. Este acto voluntario es el primero de la voluntas ut ratio. Hace más referen-
cia a los medios que al fin 38 y se entiende como el asentimiento de la voluntad
a los medios considerados por la deliberación.
37 Cfr. Summa Theologiae, I-II, qq. 11-16.
38 El consejo sigue a la deliberación (cfr. In Sententiarum, d. 24., q. 3, a. 1, ad 4).

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR