Delitos culturalmente motivados y cultural defense: un modelo multicultural fuerte

AutorCristina de Maglie
Páginas135-164
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CAPÍTULO IV
DELITOS CULTURALMENTE MOTIVADOS
Y
CULTURAL DEFENSE
UN MODELO MULTICULTURAL FUERTE
1. LA IDEOLOGÍA MULTICULTURALISTA Y LA TEORÍA
DE LA
CULTURAL DEFENSE
Las contradicciones sistemáticas y las incongruencias político-criminales
de la cultural evidence strategy han llevado a parte de la doctrina americana a
volver a tratar la materia de los conf‌lictos culturales y a elaborar nuevas cate-
gorías penales capaces de dar mejor cabida a las pretensiones de los autores
de delitos culturalmente motivados.
Ya en los años ochenta hacía una década que la ideología multiculturalis-
ta había comenzado a extenderse. Su versión más extrema y radical lleva a
manifestaciones de verdadera celebración de la diversidad y de culto al etno-
centrismo. Las exigencias de los movimientos de derechos civiles, como dice
Lawrence Friedman cambiaron: «al principio [...] el objetivo era la integra-
ción; lo que los negros querían era, en resumen, la asimilación, o al menos el
derecho a poder ser asimilados. El grito era: “llevadnos con la corriente. Que-
remos comer en vuestros restaurantes, dormir en vuestros hoteles, trabajar en
vuestras fábricas, jugar en vuestros equipos, cantar en vuestra ópera. Quere-
mos nuestra parte de América”. [...] Pero con los años los objetivos cambiaron
drásticamente: ya no eran la asimilación o la igualdad política y económica. Ya
no era el “dejadnos entrar”. Ahora el objetivo es otro: “somos distintos; somos
nosotros mismos; somos una nación separada, una cultura separada”» 1.
La atención se concentra así en el particularismo y en la dimensión étnica
y, como af‌irma Glazer, «we are all multiculturalists now» 2. La literatura so-
ciológica señala de modo impecable los factores de esta revolución cultural,
subrayando el impacto de las nuevas olas de migraciones: en los últimos años
1 L. FRIEDMAN, American Law in the Twentieth Century, 2002, p. 11.
2 GLAZER, We Are All Multiculturalists Now, 1997.
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habían llegado a los Estados Unidos millones de personas provenientes de
Asia y de Sudamérica. Ya en aquel entonces estas «minorities» raciales eran
en el país la mayoría en términos numéricos 3.
Con este fondo ideológico se publica en 1986 en la Harvard Law Review
un artículo titulado «The cultural defense in criminal law» 4. El escrito no
está f‌irmado, pero la note está destinada, por su claridad y por el rigor de los
argumentos, a convertirse en uno de los «fragmentos» más famosos y más
citados de la temática de los delitos culturalmente motivados. La propuesta
de la note es innovadora: se pide el reconocimiento formal por parte del
Derecho positivo de una cultural defense, la única solución que permitiría al
sistema americano no renegar de los ideales de justicia y de pluralismo que
son fundamentales para su supervivencia 5.
Han pasado más de veinte años de la publicación de la note y el debate
sobre la formalización de la cultural defense sigue abierto. Es una discusión
mucho más profundizada en la doctrina estadounidense, pero que no puede
estar por más tiempo conf‌inada a los Estados Unidos y catalogada como
una «cuestión americana». El debate penal sobre la cultural defense se ha
incorporado de hecho al «orden del día», es un problema que hoy en día
concierne a todas las democracias posmodernas que se están transformando
en sociedades multiétnicas y que están llamadas a declarar sobre su toleran-
cia hacia la diversidad cultural 6.
2. LA
NOCIÓN
Y LA POSICIÓN SISTEMÁTICA
DE LA
CULTURAL DEFENSE
2.1. La doctrina de las
new excuses
Sobre la noción de cultural defense no hay disensos en doctrina. Se tra-
ta de una causa de exclusión o de atenuación de la responsabilidad penal
alegable por un sujeto perteneciente a una minoría étnica con cultura, usos
y costumbres distintos o incluso en conf‌licto con los de la cultura del siste-
ma anf‌itrión 7. Para hacer valer la defense el autor debe demostrar que «el
3 Cfr., por todos, TIENDA, «Immigration, Opportunity and Social Cohesion», en SMELSER y
ALEXANDER (coords.), Diversity and Its Discontent. Cultural Conf‌lict and Common Ground in Con-
temporary American Society, 1999, pp. 131 y ss.
4 «The Cultural Defence in the Criminal Law», en Harv. L. Rev., 1986, pp. 1293 y ss.
5 «The Cultural Defence», op. cit., p. 1311.
6 Cfr. FOBLETS y RENTELN (coords.), Multicultural Jurisprudence. Comparative Perspectives on
the Cultural Defence, 2009.
7 Cfr., por todos, RENTELN, «In Defence of Culture in the Courtroom», en SHWEDER y MINOW-
MARKUS (coords.), Engaging Cultural Differences. The Multicultural Challenge in Liberal Democra-
cies, 2002, p. 196; id., «Raising Cultural Defences», en RAMÍREZ (coord.), Cultural Issues in Criminal
Defence, 2007, pp. 423 y ss. Cfr., en la literatura italiana, DE MAGLIE, «Società multiculturali e diritto
penale: la cultural defence», en Scritti in onore di Giorgio Marinucci, I, 2006, pp. 215 y ss.

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