El concepto de corrupción en las culturas políticas del republicanismo mexicano en la primera década de su independencia (1821-1831)

AutorRebeca Viñuela Pérez
Páginas131-149
EL CONCEPTO DE CORRUPCIÓN EN LAS
CULTURAS POLÍTICAS DEL REPUBLICANISMO
MEXICANO EN LA PRIMERA DÉCADA
DE SU INDEPENDENCIA (1821-1831)
Rebeca viñuela Pérez
Universidad Michoacana San Nicolás de Hidalgo
INTRODUCCIÓN
En 1793 llegaba a España una de aquellas f‌iguras del liberalismo hispánico
que dedicó gran parte de su vida a defender aquellos dogmas que prometían,
vestidos con ropajes constitucionales, futuros modelos de igualdad ciudadana
bajo el amparo del republicanismo. Se llamaba Vicente Rocafuerte, y con solo
diez años fue enviado a la ciudad de Granada para continuar sus estudios, inicia-
dos años antes en la casa familiar. Hijo de familia privilegiada, pudo viajar hasta
Europa, donde conoció a diferentes personajes que marcarían, de una forma u
otra, su destino. Allí se encontró con Simón Bolívar, quien años después sería
reconocido como uno de los libertadores de América. También a Alejandro Hum-
boldt, humanista y geógrafo que dedicó parte de su vida al estudio de la América
hispana 1.
Oriundo de Guayaquil (Virreinato de Nueva Granada), Rocafuerte regresó
a su casa en 1809. Años después, vinculado ya a la vida política de su ciudad,
fue elegido en 1813 como representante para asistir a las Cortes españolas. Allí
ejercería su función como diputado en la bancada americana, mientras conocía
a otros miembros que, como el novohispano Ramos Arizpe, se adaptaron rá-
pidamente a las nuevas corrientes teóricas de lo que más tarde se denominaría
política moderna. Con el regreso a España de Fernando VII en 1814, Rocafuerte
tuvo que huir hasta Francia a causa de la represión realista contra los defensores
del constitucionalismo liberal. Desde allí se dedicaría, durante unos años, a viajar
1 V. rocafuerte, Rocafuerte y la democracia de Estados Unidos de Norte América, Quito, Tall.
Gráf. Nacionales, 1947, p.XI.
132 REBECA VIÑUELA PÉREZ
por toda Europa, hasta que en 1816 partió de nuevo hacia tierras americanas 2.
A pesar de que en un inicio pretendió retirarse de los conf‌lictos políticos que
asolaban su región, al f‌inal terminó ejerciendo como columnista político en la
prensa cubana hasta que en 1820, supuestamente bajo misión secreta para Si-
món Bolívar, Rocafuerte regresó a España con el f‌in de informar del estado de
la revolución en la península ibérica tras el levantamiento del general Riego y el
regreso del constitucionalismo 3.
Allí, Rocafuerte encontró un sistema liberal con pocas posibilidades de per-
durar. Las amenazas europeas, traducidas en conspiraciones amparadas bajo la
observancia de la Santa Liga, y el apoyo del rey a todos aquellos intentos por
restaurar el absolutismo en el país le llevaron a pensar que el futuro de España
no estaba atado, en modo alguno, a la nueva política. Era cuestión de tiempo,
especulaba, que todo volviese a las antiguas estructuras monárquicas que se en-
contraban, en la mayor parte del continente europeo, anquilosadas en tradicio-
nalismos propios del feudalismo 4. Parecía poco probable, entonces, que las revo-
luciones en América fuesen pacif‌icadas mediante la negociación con un gobierno
liberal que, en constante pugna política, no terminaba de ponerse de acuerdo
respecto al mejor medio de solucionar el problema territorial que se extendía a lo
largo y ancho de un imperio. Y fue entonces que su defensa de una negociación
que evitase las independencias, argumento que había defendido durante los años
anteriores, se convirtió en la creencia de que estas serían la única solución a un
conf‌licto inabarcable para el gobierno español 5.
Para 1821, al otro lado del Atlántico, la situación de México no presagiaba un
buen futuro para la Monarquía hispánica. Las batallas de Maipú (1818) y Boyacá
(1819) casi habían conseguido, años antes, terminar con la presencia de tropas
realistas en La Gran Colombia y en Venezuela. Las Provincias Unidas se habían
declarado independientes en 1816 y Chile en 1818 (con excepción de Chiloé).
El ejército de San Martín conseguiría también independizar Perú en 1821, con
lo que el territorio continental quedaba ya prácticamente escindido de la estruc-
tura imperial española 6. Para 1820, México, aún Nueva España, representaba la
última remesa que la Monarquía española recibía de los territorios americanos,
y el único desahogo para una Hacienda castigada por los costos materiales de la
invasión napoleónica y de las revoluciones atlánticas 7.
2 Para más información sobre la biografía de Vicente Rocafuerte, se puede consultar: G. Maldo-
nado cabezas y E. Poblete oña, Vicente Rocafuerte: pensamiento y práctica política, 2014; M.ar-
teaga calderón, Las ideas sociales de Rocafuerte, 2014; J. E. rodríguez O., «El nacimiento de His-
panoamérica : Vicente Rocafuerte y el hispanoamericanismo, 1808-1832», Ciudad de México, Fondo de
Cultura Económica, 1980, http://site.ebrary.com/id/10914790; Eloy vélez viteri, Vicente Rocafuerte
y el panamericanismo, Guayaquil, Ecuador, Biblioteca de la Muy Ilustre Municipalidad de Guayaquil,
2001.
3 Rocafuerte, Rocafuerte y la democracia de Estados Unidos de Norte América, pp.12-13.
4 Ibid., p.13.
5 C. altaMirano y J. Myers, Historia de los intelectuales en América Latina. I, I,Buenos Aires,
Katz, 2008, p.136.
6 M. chust y P. rúJula, El Trienio Liberal. Revolución e independencia (1820-1823), Madrid,
Catarata, 2020.
7 Ibid.

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR