Introducción

AutorCristian Contreras Rojas
Páginas19-23
19
INTRODUCCIÓN
Nada nuevo hacemos al resaltar la importancia de la prueba para el re-
sultado del juicio jurisdiccional. De hecho, a pesar de que hasta época re-
ciente su estudio científ‌ico no fue una cuestión que motivara en demasía a la
doctrina procesal 1, hoy no son pocos los trabajos que de forma notable han
abordado este tema, mediante aproximaciones que exceden con mucho el
terreno estrictamente jurídico 2.
Estamos conscientes de que la prueba cumple un papel insustituible para
averiguar la verdad de los hechos y, por consiguiente, para encontrar la re-
solución acertada del conf‌licto que se ha sometido a la decisión del juez.
Difícilmente alguien podría desconocer esta realidad. Empero, no basta con
reconocer el papel de la prueba, sino que, en la práctica, hay que saber per-
fectamente qué hacer con ella. Dicho de otra forma, de nada sirve que las
partes se esmeren en presentar los que, en su concepto, son los mejores ins-
trumentos de convicción que poseen, si una vez incorporados al proceso el
juez no sabe extraer toda la información que estos pueden aportar ni es ca-
paz de valorar adecuadamente la que pongan a su disposición.
Asimismo, no puede soslayarse que el éxito de todo el proceso comien-
za por la actividad de las partes, ya que —aunque huelga recordarlo— son
1 Con la notable excepción de Jeremías BENTHAM y su excelente obra Tratado de las pruebas
judiciales.
2 Solo por señalar los más destacados: H. DEVIS ECHANDÍA, Teoría general de la prueba judicial,
Bogotá, 2002; J. FERRER BELTRÁN, La valoración racional de la prueba, Madrid, 2007; M. GASCÓN
ABELLÁN, Los hechos en el derecho: bases argumentales de la prueba, Madrid, 2004; J. MONTERO
AROCA, La prueba en el proceso civil, Madrid, 2007; J. NIEVA FENOLL, La valoración de la prueba,
Madrid, 2010; J. PICÓ I JUNOY, El derecho a la prueba en el proceso civil, Barcelona, 1996; M. SERRA
DOMÍNGUEZ, «De la prueba de las obligaciones», en Comentarios al Código Civil y compilaciones
forales, M. Albaladejo (dir.), t. XVI, vol. 2, Madrid, 1981; y por supuesto, toda la extensa obra de
M. TARUFFO, compuesta, entre otras, por: La prueba de los hechos, traducción de Jordi Ferrer Bel-
trán, Madrid, 2005; La prueba, traducción de Laura Manríquez y Jordi Ferrer Beltrán, Madrid,
2008; Simplemente la verdad: el juez y la construcción de los hechos, traducción de Daniela Accatino
Scagliotti, Madrid, 2010.

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR