La filatelia como producto de inversión

AutorC. Román; A. Blanco ; A. Concejo
Cargo del AutorUniversidad Rey Juan Carlos
Páginas67-74

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Previa introducción del sello, existían diversos sistemas de tasas y pagos por el correo, que servían para comunicar noticias y todo tipo de mensajes de una punta a otra del globo, si bien, lo que más abundaba era el intercambio de noticias entre puntos relativamente cercanos. Se conservan restos de estos sistemas de pago por el transporte de noticias. A estos sistemas es a lo que se conoce como prefilatélicos, por ser los imperantes antes del advenimiento del sello adhesivo en 1840 en Gran Bretaña.

Es decir, la prefilatelia es el estudio y coleccionismo de las marcas postales anteriores a la implantación del sello adhesivo de correos y aunque existe un mercado sobre ellos es mucho más reducido que el de la filatelia.

Se suele considerar como padre del sello de correos tal y como le conocemos hoy a Rowland Hill, quien ideó este sistema para evitar los fraudes que continuamente se realizaban al servicio británico de correos. Concretamente, en 1835 propuso a la Cámara de los Comunes: "El reintegro del porte de la carta según su peso, y no por la distancia, mediante tarifa única para toda la nación, y abonada en el punto de origen por el remitente".

El 13 de febrero de 1837 Rowland Hill presentó el proyecto de sus sellos adhesivos junto con un folleto explicativo a los encargados del servicio Postal del Estado. El folleto de Hill, titulado "Post Office Reform", originó la designación de un Comité de la Cámara de los Comunes (22 de noviembre de 1837), encargado de estudiar los tipos y sistemas del franqueo postal. Este Comité informó favorablemente sobre la posición de Rowland Hill y en 1839 se dictó una providencia autorizando al Tesoro para fijar los tipos de franqueo postal y regular el modo de percibir su importe previo. Los sobres timbrados y los sellos adhesivos los emitiría el Gobierno.

Posteriormente, el 27 de agosto de 1839, la Reina Victoria sancionó la famosa Ley de Reforma Postal, y el 6 de mayo de 1840 aparecía en Gran Bretaña el primer sello de Correos del mundo, el famoso penique negro. En realidad, los dos primeros sellos del mundo, ya que el penique negro fue acompañado de otro de dos peniques azul, ambos con la efigie de la Soberana Británica.

Y es el 1 de enero de 1850 cuando el reino de España pone en circulación cinco sellos postales.

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La filatelia no es sólo el sello de Correo. También los sobres, y en especial los matasellos y marcas postales estampados sobre ellos, constituyen documentos de muy alto valor e interés porque ningún fedatario puede dejar constancia, con más precisión que ellos lo hacen, de una fecha histórica, de una efeméride, de un acontecimiento, o de una conmemoración, tal como lo recoge el que fuera Inspector General de Correos y Telecomunicación, Manuel T. Espinosa, en su prólogo a la obra "Como coleccionar sellos".

Cuando hablamos de filatelia, no podemos olvidar su presencia en documentos reales o de contiendas, cédulas de compras o ventas de esclavos, vuelos pioneros o navegaciones memorables entre continentes, reflejos de imperios, caídas de gobiernos, hundimientos de estados, resurgimientos culturales, cracs económicos, y mil y un...

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