Los cuidados paliativos: el rol del trabajador social en el final de la vida
| Autor | Carmen Delia Díaz Bolaños |
| Páginas | 35-58 |
LOS CUIDADOS PALIATIVOS:
EL ROL DEL TRABAJADOR SOCIAL
EN EL FINAL DE LA VIDA
Carmen Delia Díaz Bolaños
Universidad de Las Palmas de Gran Canaria
Número ORCID: 0000-0002-2193-0173
SUMARIO: 1. LA GÉNESIS DE LOS CUIDADOS PALIATIVOS. 1.1. EL PUNTO
DE PARTIDA DE LOS CUIDADOS PALIATIVOS 1.2. EL PLAN NACIONAL DE
CUIDADOS PALIATIVOS. 2. LA ENFERMEDAD TERMINAL Y SU IMPACTO
SOCIAL. 3. EL TRABAJADOR SOCIAL EN LOS CUIDADOS PALIATIVOS AL
FINAL DE LA VIDA. 4. ATENCIÓN SOCIOFAMILIAR DESDE EL TRABAJO SO
CIAL. 5. CONCLUSIONES.6. BIBLIOGRAFÍA.
1. LA GÉNESIS DE LOS CUIDADOS PALIATIVOS
Cubrir las necesidades relacionadas con las patologías clínicas invalidantes a tra-
vés de la implementación de cuidados paliativos ha sido una demanda reconocida
en la sociedad desde principios de la década de 1980. No obstante, la actualidad se
caracteriza por una considerable concienciación y solidaridad en relación con la ne-
cesidad de visibilizar los cuidados de las enfermedades crónicas, sobre todo, en el
nal de la vida.
En este trabajo se plantea la necesidad de examinar en profundidad el enfoque de los
cuidados paliativos desde tres perspectivas distintas. Por un lado, se busca comprender
la evolución de los cuidados paliativos en el contexto de España, lo cual implica tra-
zar la trayectoria histórica que ha llevado a su establecimiento, desde sus inicios hasta
su reconocimiento como un derecho para los pacientes. Y por otro, conocer en las ne-
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cesidades que presentan los pacientes en esta fase de su enfermedad y el impacto que
producen en sus vidas familiares, para nalmente profundizar en el papel que debe des-
empeñar el profesional del Trabajo Social, en todo el proceso del nal de la vida.
La Organización Mundial de la Salud (OMS), en 2002 denió los cuidados palia-
tivos como:
Aquellos cuidados que mejoran la calidad de vida de los enfermos de cáncer y sus
familiares, afectados por los problemas derivados de una enfermedad amenazadora
de la vida porque previenen y alivian el sufrimiento mediante la pronta identicación
y la evaluación y el tratamiento precisos de los dolores y otros problemas de orden fí-
sico, psicosocial y espiritual (OMS, 2002, p.9).
Este organismo reconoce este tipo de cuidados como un derecho humano en
relación con la salud, y por ello debe ser proporcionado a través de los servicios de
salud con una atención individualizada, centrada en la persona y las especicidades
de su situación.
Una estimación realizada por la OMS (2020)1 plantea que al año 40 millones de
personas necesitan cuidados paliativos a nivel mundial y que tan sólo un 14% de ellas
tienen acceso a los mismos. La previsión es que siga aumentado estas necesidades por
el proceso de envejecimiento de la población y las enfermedades crónicas como las
cardiovasculares, el cáncer, enfermedades respiratorias crónicas, SIDA, diabetes, Par-
kinson, enfermedades neurológicas, demencia etc.
Los cuidados paliativos suelen dar cobertura a un síntoma que predomina en to-
das las enfermedades señaladas anteriormente: el dolor. Este síntoma condiciona las
vidas de las personas que sufren estas patologías y la de los entornos familiares y de
cuidados. Hace necesario intervenciones especícas para intervenir en dichos entor-
nos, el control de esos síntomas es una obligación moral para aliviar el sufrimiento.
Es en este punto donde la gura de profesionales como los trabajadores sociales
son centrales en esta etapa de la enfermedad, dando respuestas de carácter social a la
persona, a los cuidadores y familiares, además de ofrecerles el alivio de los síntomas
sanitarios.
La OMS dene el rol de la trabajadora social como el de asistir a las familias ade-
más de al paciente con aquellas dicultades personales y/o sociales que conlleve la
enfermedad; además de ofrecer apoyo durante el trascurso de la enfermedad y el pro-
ceso de duelo en el que se encuentre el paciente en fase terminal (OMS, 2007).
Es necesario precisar que los cuidados durante el nal de la vida pueden formar
parte de la estructura global de los cuidados paliativos. A pesar de ello, esta rela-
ción no es recíproca. Los cuidados paliativos se brindan a personas cuya expectativa
de vida es inferior a seis meses, en contraste con los cuidados en la fase nal de la
vida, que se concentran en los últimos días de una persona. Esto representa un mo-
1 Disponible en: https://www.who.int/es/news-room/fact-sheets/detail/palliative-care
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