Valoración y discusión de los resultados de la investigación
| Autor | Daniel Varona Gómez |
| Páginas | 119-166 |
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CAPÍTULO IV
VALORACIÓN Y DISCUSIÓN DE LOS RESULTADOS
DE LA INVESTIGACIÓN
Lo primero que debe destacarse es que los dos tratamientos diseñados en
la presente investigación tuvieron un impacto relevante en la opinión ciuda-
dana. Ya hubieran participado en la experiencia deliberativa, ya lo hubieran
hecho en el visionado del vídeo, los participantes experimentaron un cambio
en sus actitudes en las dos escalas diseñadas, relativas a las actitudes puni-
tivas y la concepción sobre la rehabilitación. Y un cambio en la dirección
esperada: hacia actitudes menos punitivas y hacia un modelo humanitario y
no represivo de la rehabilitación.
Creemos que ello es particularmente significativo si tenemos en cuenta
que en nuestra investigación la «dosis» del tratamiento puede considerarse
moderada. Así, en el caso del foro deliberativo, hemos de subrayar que los
participantes meramente tuvieron que leer un breve documento de diez fo-
lios y participar en una discusión on-line de apenas una hora de duración
aproximada. Lejos, por tanto, del ideal diseñado por Fishkin, basado en reu-
niones ciudadanas de dos días de duración, con diversos debates y reuniones
plenarias, en formato de pequeño grupo y de gran grupo 1. Por su parte, en el
caso del visionado del vídeo, estamos hablando de un documental de apenas
treinta minutos de duración.
Los resultados son, en este sentido, casi «sospechosos» de lo positivos
que son, y un lector podría legítimamente preguntarse: ¿es genuino el cam-
bio?; ¿es un mero efecto del poder persuasivo del moderador en el foro
deliberativo?; ¿es todo ello un ejemplo del llamado «Hawthorne effect» 2?
1 El propio FISHKIN (2009a: 170) ya señala que los foros presenciales suelen obtener cambios
de opinión de mayor magnitud que los foros on-line, pues «a face-to-face deliberation over an entire
weekend is probably a more intense experience than a disembodied conversation twice a week for an
hour at home via a computer screen».
2 Se conoce como «Efecto Hawthorne» a una forma de reactividad psicológica por la que los
sujetos de un experimento muestran una modificación en algún aspecto de su conducta como con-
secuencia del hecho de saber que están siendo estudiados y anticipar lo que «se espera de ellos», y
no en respuesta a ningún tipo de manipulación contemplada en el estudio experimental.
Daniel Varona Gómez
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Responder a estas preguntas requiere obviamente analizar en profundi-
dad las posibles razones o explicaciones del cambio en las actitudes.
1. ¿POR QUÉ CAMBIAN LAS ACTITUDES?
La cuestión, como decimos, es obviamente, a qué podemos atribuir el
relevante impacto en la opinión ciudadana de tratamientos ciertamente mo-
destos. Esta es, de hecho, la pregunta clave que trata de responderse en todo
proceso de encuesta deliberativa: ¿es la información adquirida la que lleva
al cambio de actitudes? o ¿es más bien la deliberación —y si fuera así, qué
aspecto de lo que pasa durante la deliberación es el más relevante—? Y en el
caso del visionado del vídeo, ¿qué es lo que lleva al cambio en las actitudes?
Conscientes de la importancia capital de esta cuestión, en nuestra inves-
tigación llevamos a cabo diversas estrategias paralelas para tratar de averi-
guar las razones del cambio en las actitudes de nuestros ciudadanos.
1.1. La propia valoración personal de la experiencia
Lo primero que hicimos fue, de forma directa, preguntar a todos los par-
ticipantes en uno de los dos grupos de tratamiento si la experiencia vivida
(foro deliberativo o visionado del vídeo) había cambiado (o no) su visión
sobre la delincuencia y los delincuentes. Y en caso afirmativo les pedíamos
que explicaran qué había cambiado y por qué. Estos son los resultados de
dichas preguntas, primero para el foro deliberativo, y segundo, para el vídeo
(en los dos casos la muestra es el total de participantes, o bien en el foro, o
bien en el visionado del vídeo, esto es, 300 personas):
¿Crees que la lectura del documento informativo
y la participación en el foro han cambiado en algo tus opiniones
o creencias sobre la Justicia Penal o los delincuentes?
Sí (n = 214)
71,3%
No
(n = 75)
25,0%
No sabe/No contesta
(n = 11)
3,7%
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Valoración y discusión de los resultados de la investigación
¿Crees que el visionado del vídeo ha cambiado en algo tus opiniones
o creencias sobre la Justicia Penal o los delincuentes?
Sí (n = 171)
57,0%
No (n = 109)
36,3%
No sabe/No contesta
(n = 20)
6,7%
Curiosamente, aunque según hemos visto (y este es un aspecto para la re-
flexión) el vídeo tuvo un impacto mayor que el foro deliberativo en términos
cuantitativos relativos al cambio en las actitudes (en nuestras dos variables
dependientes), fue mayor el porcentaje de participantes en el foro que afir-
mó haber modificado su opinión (un 71,3 por 100, frente a un 57 por 100
en el caso del vídeo). Da la impresión de que el impacto emotivo no llegó a
tanta gente como el estímulo cognitivo (informativo), pero cuando efectiva-
mente lo hizo su efecto fue más intenso 3.
De todas formas, la pregunta más interesante era la siguiente, donde, a
aquellos que habían contestado afirmativamente a la cuestión anterior, se les
pedía que explicaran en qué sentido y por qué habían cambiado su opinión
o creencia con respecto a la Justicia Penal o los delincuentes.
El siguiente gráfico recoge, por categorías, las respuestas más numerosas
de los participantes en el foro 4:
3 De hecho, en un análisis estadístico pudimos comprobar que aquellos que respondieron
afirmativamente a la pregunta relativa a si el visionado del vídeo había modificado su opinión sobre
la justicia penal o los delincuentes (n = 171), experimentaron un cambio en sus actitudes muy re-
levante y mayor (en términos comparativos) al producido por aquellos que respondieron también
afirmativamente a la misma pregunta para el caso de foro deliberativo (n = 214).
4 Debe destacarse que la pregunta a los participantes era abierta, esto es, sin sugerir ningún
tipo de respuesta. Lo que se presenta en el gráfico es la recodificación de las respuestas de los
participantes que nosotros llevamos a cabo, tratando de agruparlas en ciertas categorías. Por otra
parte, cabe aclarar que las respuestas aquí presentadas (n = 298) superan la cifra de participantes
en el foro que manifestó haber cambiado sus opiniones (n = 214), porque estos podían dar más de
una respuesta a la pregunta planteada, y por ello es posible que la opinión de un participante quede
reflejada en más de una categoría.
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