Las implicaciones de la covid-19 en el alumnado universitario
| Autor | Enriqueta Camacho Peñalosa y María José Vázquez Cueto |
| Cargo del Autor | Universidad de Sevilla |
| Páginas | 403-414 |
— 403—
CAPÍTULO
LAS IMPLICACIONES DE LA COVID-19 EN EL ALUMNADO UNIVERSITARIO
ENRIQUETA CAMACHO PEÑALOSA Y MARÍA JOSÉ VÁZQUEZ CUETO
Universidad de Sevilla
INTRODUCCIÓN
Al inicio del segundo cuatrimestre del curso académico 2019 -2020, la Covid-19
irrumpió repentinamente en la vida universitaria. El aislamiento social obligatorio,
decretado por el Gobierno tras el establecimiento del estado de alarma sanitaria,
provocó el cierre temporal del campus universitario. Dado el cambio tan repentino
como inesperado, en la práctica totalidad de las instituciones educativas solo se pudo
virtualizar la docencia presencial.
El éxito, en mayor o menor medida, de esta migración, también denominada
enseñanza remota de emergencia (Hodges et al., 2020; Pardo y Cobo, 2020), fue
gracias al esfuerzo de los dos principales agentes del sistema educativo: profesorado-
estudiantado, aunque bien es cierto que no hubiera sido posible sin el apoyo de las
instituciones.
Para el nuevo curso académico 2020-2021, y dado que el estado de alarma seguía
vigente, la mayoría de las instituciones universitarias propusieron dos tipos de
modalidad docente: El sistema bimodal (combinación de clases presenciales y clases
online) aplicable cuando las condiciones sanitarias lo permitiesen, siendo el centro
educativo el que determinara el aforo de las aulas en las sesiones presenciales y la
asignación de estas; y la modalidad totalmente online.
El curso se inició con el sistema bimodal, obligándonos, tras los rebrotes del virus,
a cambiar a la modalidad online a las pocas semanas. Esta situación se mantuvo hasta
la segunda mitad del segundo cuatrimestre en la que volvimos al sistema bimodal.
Es evidente que la pandemia ha cambiado todos los aspectos de nuestra vida, y
por ende el desarrollo del sistema educativo universitario. Podemos afirmar, después
de lo vivido como parte integrante y comprometida del proceso educativo, que en la
enseñanza superior ha habido un antes y probablemente habrá un después de la
Covid-19.
Como bien afirma Masoero (2020), es imprescindible conocer cómo se ha
desarrollado la docencia en estos meses tan atípicos para realizar un correcto diseño
de la docencia post pandémica. Previsiblemente cambiaremos la docencia presencial
tal y como se desarrollaba antes de la pandemia, por lo que parece recomendable
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