Sentencia condenatoria con atenuante de responsabilidad criminal
| Autor | Bernat-Noël Tiffon Nonis |
| Cargo del Autor | Doctor en Medicina Legal y Forense, Universidad de Barcelona |
| Páginas | 131-219 |
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32 Contacto:
Profesor de Psicología Criminal y Psicología Jurídica. Universidad del País Vasco.
Grupo de Investigación en Criminología Aplicada (CRIM-AP).
Mail de contacto: cesar.sanjuan@ehu.eus
Enlace web: https://www.ehu.eus/es/web/dms/equipo
33 Acerca del autor:
• Licenciado en Psicología por la Universidad del País Vasco. Becado
Erasmus en 1989 obteniendo la especialidad en Psicología Social por
la Universidad Católica de Lovaina (Bélgica).
• Doctor en Psicología por la Universidad del País Vasco en 1991 con
la tesis «Representaciones sociales del SIDA: Discursos y sesgos cog-
nitivos».
• En la actualidad, profesor titular del Departamento de Psicología So-
cial en la Universidad del País Vasco impartiendo las asignaturas,
«Psicología Ambiental», y «Psicología Criminal». Desde el año 2002,
subdirector del Instituto Vasco de Criminología; y desde 2006 Direc-
tor del International Research Centre on Delinquency, Marginality
and Social Relationships.
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SENTENCIA CONDENATORIA
CON ATENUANTE DE
RESPONSABILIDAD CRIMINAL
Dr. César San Juan Guillén 32, 33
Profesor de Psicología Criminal en la Universidad del País Vasco
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ATLAS PRÁCTICO-CRIMINOLÓGICO DE PSICOMETRÍA FORENSE (Volumen I): ASESINATOS
DR. CÉSAR SAN JUAN GUILLÉN
• Profesor invitado en algunas universidades españolas e internaciona-
les, como la Diego Portales (Santiago de Chile), la Universidad Cen-
troamericana (Managua, Nicaragua), la Universidad Mayor de San
Simón (Bolivia), la London School of Economics (Londres, Reino
Unido), la Universidad José Simón Cañas (San Salvador, El Salvador)
o la Universidad de Palermo (Buenos Aires, Argentina).
• Ha dirigido numerosos proyectos de cooperación al desarrollo en el
campo de la resolución de conflictos, la intervención psicosocial, la
educación para la salud, etc. en diversos países de América Latina y
África. Autor de diversos artículos sobre la intervención psicosocial
en catástrofes y emergencias, es además editor en este ámbito del
volumen «Catástrofes y ayuda de emergencia».
• En la actualidad desarrolla diversos estudios en torno a los proble-
mas sociales relacionados con la seguridad urbana siendo coautor en
este campo del manual «Criminología Ambiental: Ecología del delito
y de la seguridad». Buena parte de estos trabajos son el resultado de
proyectos de investigación financiados por entidades públicas de la
Comunidad Autónoma Vasca. En el marco del denominado progra-
ma AGIS, financiado por la Comisión Europea ha dirigido un pro-
yecto sobre la realidad de los menores extranjeros infractores. Tam-
bién financiado por la Comisión Europea, en el marco del programa
DAPHNE, ha dirigido el proyecto «Qualitative and meta-analytic
study of specific and primary prevention programs of violence
against women: developing indicators on violence and related data
collection». Desde el año 2003, mediante convenio de colaboración
con el Dept. de Ejecución Penal del Gobierno Vasco, dirige la evalua-
ción del Plan de Justicia Juvenil.
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11 SENTENCIA CONDENATORIA CON ATENUANTE DE RESPONSABILIDAD CRIMINAL
11.1. Introducción al presente capítulo:
Las razones para matar: el sueño de
la razón produce monstruos
En su libro «Hacer el mal» la psicóloga norteamericana Julia
Shaw nos recuerda esa mítica serie de dibujos animados que adorába-
mos los de nuestra generación protagonizada por un grupo de cuatro
jóvenes y un perro gran danés parlante, Scooby-Doo. Viajaban en una
camioneta llamada «la máquina del misterio» siempre convocados
por vecindarios que vivían atemorizados por la presencia de fuerzas
sobrenaturales o algún fantasma monstruoso. Todos los episodios te-
nían el mismo desenlace, las supuestas fuerzas sobrenaturales tenían
una explicación racional y debajo de la careta del fantasma monstruo-
so solo había un tipo con un disfraz. No había monstruos.
La autora usa esta metáfora para ilustrar nuestra tendencia a
buscar explicaciones fáciles a la maldad. Pero, insiste, quizás descu-
bramos que no existen explicaciones simples a la pregunta de por
qué los humanos hacemos cosas malas. Seguramente también en-
contremos una gran diversidad de respuestas, que probablemente
transiten entre la impronta genética y las influencias ambientales, a
la pregunta de por qué algunos de estos seres humanos asesinan a
sus congéneres.
En este recorrido, el primer nivel de explicación lo deberemos
situar en un plano puramente organicista. Efectivamente, el homi-
cidio es un problema social importante y generador de un impacto
emocional incalculable en las víctimas y en la sociedad. Por esta ra-
zón, desde el ámbito de las neurociencias se han hecho en la última
década importantes avances en la búsqueda de una explicación al
asesinato que han proporcionado un considerable cuerpo empírico
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