M. COBO DEL ROSAL/ J.Mª. SUÁREZ LÓPEZ: Código penal (Con concordancias, jurisprudencia, bibliografía y anotaciones sobre su vigencia anterior y posterior a octubre de 2004). Editorial Bosch. Barcelona, 2004, 733 páginas

AutorLorenzo Morillas Cueva
CargoCatedrático de Derecho penal en la Universidad de Granada
Páginas167-169

Page 167

El controvertido y sumamente criticado Código penal de 1995 termina su Exposición de Motivos con una proclama que con el tiempo se ha demostrado no era un simple alegato formal sino una afirmación especialmente llena de contenido, que ni el propio legislador, seguramente, valoró en su alcance posterior: «No se pretende haber realizado una obra perfecta, sino, simplemente, una obra útil. El Gobierno no tiene aquí la última palabra, sino solamente la primera. Se limita, pues, con este proyecto, a pronunciarla, invitando a todas las fuerzas políticas y a todos los ciudadanos a colaborar en la tarea de su perfeccionamiento. Solamente si todos deseamos tener un Código Penal mejor y contribuimos a conseguirlo podrá lograrse un objetivo cuya importancia para la convivencia y el pacífico disfrute de los derechos y libertades que la Constitución proclama difícilmente podría exagerarse».

Y el Código se aprobó. Y de inmediato, con una más que discutible política legislativa, se fue modificando con la avidez de la improvisación, con la incertidumbre de la falta de una política criminal coherente, con el excesivamente frecuente desprecio de los principios más básicos del Derecho penal moderno, con el objetivo distorsionado de un descontrolado endurecimiento de las penas, con la creación de nuevos tipos que enrojecerían de pudor a los más liberales y progresistas de nuestros históricos penalistas, con la creación de comisiones de especialistas que en un sublime intento de reconducir la situación son, por el contrario, casi ignoradas en lo esencial y utilizadas en lo secundario. Y la situación sigue. Han sido diecisiete las reformas que desde la entrada en vigor del Código se han producido y todavía se anuncian más en parecida línea de despropósitos legislativos, de oportunistas utilizaciones del Texto punitivo; incluso por aquellos que por su vínculo ideológico más comprometidos han de estar con el garantismo penal, con un derecho preventivista, integrador socialmente y recuperador de los ciudadanos que delinquen, sobre políticas sociales y criminales sustentadas en mecanismos alternativos a la pena de privación de libertad.

En esta situación de confusión legislativa son de agradecer los esfuerzos de los especialistas en el ámbito penal que con gran trabajo ponen a disposición de todos, de forma, en este caso, ejemplar, textos estructurados con una adecuada sistemática que, al menos, hacen más comprensiva la realidad punitiva. Es el caso de la...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR