SAP Barcelona 339/2012, 6 de Junio de 2012

PonenteJULI SOLAZ PONSIRENAS
ECLIES:APB:2012:6607
Número de Recurso120/2012
ProcedimientoAPELACIóN PENAL
Número de Resolución339/2012
Fecha de Resolución 6 de Junio de 2012
EmisorAudiencia Provincial - Barcelona, Sección 22ª

Audiència Provincial de Barcelona

Secció Vint-i-dosena

Rotlle apel·lació penal núm. 120/2012

Referència de procedència:

JUTJAT PENAL 1 MANRESA

Procediment Abreujat núm. 36/2012

Data sentència recorreguda: 10/04/2012

SENTÈNCIA NÚM. 339/2012

Magistrats/des:

Joan Francesc Uría Martínez

Juli Solaz Ponsirenas

Patricia Martínez Madero

La dicta la Secció Vint-i-dosena de l'Audiència Provincial de Barcelona en recurs d'apel·lació núm. 120/2012, interposat contra la Sentència pronunciada pel JUTJAT PENAL 1 MANRESA en data 10/04/2012, en procediment Abreujat núm. 36/2012. Han estat parts apel.lant, el Ministeri Fiscal i apel.lades Secundino

, defensat pel Lletrat Pilar Rius Pastor, i Tarsila, defensada pel Lletrat Josep Sardans Male. D'aquesta sentència, que expressa l'opinió del Tribunal, ha estat ponent Juli Solaz Ponsirenas.

Barcelona, sis de juny de dos mil dotze.

Antecedents de fet

Primer

El dia 10 d'abril de 2012 el Jutjat del Penal núm. 1 de Manresa dictà sentència amb la decisió següent: "Absuelvo a Secundino como autor penalmente responsable del delito de Violencia Doméstica del artículo 153.1 y 3 del código penal que se le imputaba.

Declarándose de oficio del pago de las costas procesales.

No se han acordado ni existen medidas cautelares en vigor decretadas en el presente proceso".

A la citada sentència es declaren provats els fets següents: " Único.- Se declara probado que el día 12 de Octubre de 2011 sobre las 03.30 horas los acusados sostuvieron una discusión, sin que haya quedado probado que las lesiones referidas en el atestado se las ocasionara el acusado ".

Segon

Formulat recurs d'apel·lació pel Ministeri Fiscal, el Jutjat el va admetre a tràmit, li donà curs i finalment va remetre les actuacions originades a aquest Tribunal per a la decisió. La representació processal de l'acusat i la representació processal de la denunciant han sol·licitat la desestimació del recurs i la confirmació de la sentència impugnada. Tercer.- D' aquesta sentència, que expressa l' opinió unànime d' aquest Tribunal, ha estat ponent Juli Solaz Ponsirenas.

Fets provats

S'accepten els fets declarats provats en la sentència recorreguda.

Fonaments de dret

Primer

L'apel·lant impugna la sentència dictada en primera instància adduint, com a únic motiu, l'error en l'apreciació de la prova al no valorar la documental consistent en la declaració del imputat en seu judicial.

Segon

El recurs no pot ser estimat. Així, en primer lloc, el que s'ha de dir és que el Ministeri Públic confon prova documental amb prova documentada i, en el cas que ens ocupa, qualsevol declaració judicial és clar que no és prova documental si no que és una prova que es recull en un document, cosa miolt diferent. Dit això, és cert que la jurisprudència del la Sala Segona del Tribunal Suprem admet valor probatori a les declaracions sumarials de l'acusat que en l'acte del judici oral s'acull al seu dret a no declarar, tal i com es recull en la sentència núm. 95/2010, de 12 de febrer, on s'afirma que: "La cuestión, pues, que ha de dilucidarse en este recurso es el valor probatorio de las declaraciones sumariales del acusado. En efecto, como relatan los jueces "a quibus", en el acto del plenario, únicamente mantuvo la acusación el Ministerio Fiscal, y la víctima, acogiéndose al referido derecho establecido en el art. 416 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, guardó silencio, así como también el acusado, de conformidad con lo dispuesto en el art. 24.2 de la Constitución española . Únicamente quedaban a salvo las pruebas de contenido documental. Ante ello, el Tribunal de instancia, exclusivamente rescata como elementos incriminatorios los aspectos fácticos que fueron reconocidos por el ahora recurrente, en una declaración indagatoria, oportunamente grabada, que fue introducida en el proceso por la vía autorizada en elart. 730 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal. El Ministerio Fiscal se aquietó con este fallo, y en consecuencia, solamente hemos de responder a los alegatos de la defensa, que se contienen en esta censura casacional.

Antes de continuar, hemos de poner de manifiesto que, según resulta de nuestra Sentencia 129/2009

, las declaraciones sumariales de la víctima, que se acoge en el acto del plenario al derecho a no declarar contra sus parientes (entre ellos, su cónyuge), no pueden ser "reintroducidas", mediante su lectura en el juicio oral, para hacerlas ingresar válidamente en el proceso, y ser, en consecuencia, valoradas por el Tribunal sentenciador. Dicha sentencia sienta la doctrina, posteriormente seguida por otras resoluciones de este Tribunal Supremo, de que la víctima es libre de mantener o no, sus declaraciones anteriores, y si no lo hace, ni existe una situación de imposibilidad de declarar (ex art. 730), ni de contradicción (ex art. 714) con lo ya declarado, por lo que no es la posible la "reintroducción en el plenario" por esa vía indirecta. Como así ocurrió en este caso, nada incriminatorio podían rescatarde tales declaraciones los juzgadores de instancia; de ahí se explica la mayor parte de las absoluciones que decretan.

Distinto es el marco jurídico que ha concedido esta Sala al silencio del acusado que se produce ya en el escenario del plenario, conforme al ejercicio de un derecho constitucional del acusado ( art. 24.2 CE ). En efecto, puede ocurrir que el imputado, ante el juez instructor, asistido de letrado, y con lectura de sus derechos constitucionales, especialmente el de no declarar contra sí mismo, renuncie al mismo, y ofrezca, sin embargo, una versión propia de los hechos, o, como aquí ocurre - aunque niegue en su mayor parte las imputaciones que le había denunciado su esposa-, admita algunos episodios, dándoles por ciertos.

Ante ello, la Sala sentenciadora de instancia descansó su convicción judicial en la propia admisión sumarial de hechos del acusado, en tanto que afirmó que, conociendo que tenía en vigor una orden de alejamiento, pasó a convivir de nuevo en el domicilio familiar, quebrantando la medida por...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR