Registrador de la Propiedad

AutorRamón de la Rica y Arenal
CargoDoctor en Derecho y Registrador de la Propiedad
Páginas364-381

Registrador de la Propiedad1

(Presente y futuro de la propiedad registral)

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I Exordio

Una de mis mayores satisfacciones de los últimos tiempos me la han proporcionado el Magnífico señor Rector de la ilustre Universidad de Oviedo y el Catedrático Director del Secretariado de Extensión Universitaria al dispensarme el honor de dirigir la palabra a los estudiantes. Porque para un profesional jurista -procedente,Page 365 por tanto, de las aulas universitarias-, para un profesional que está ya en las últimas etapas de su carrera y para quien por razón de los años son ya más los recuerdos que las esperanzas, nada, más grato ni más confortador que el contacto con la juventud y, sobre todo, con la juventud culta que trabaja y estudia y que trata, .con las armas dé la ciencia y 1a. disciplina, -de conquistar el porvenir, siempre reservado a los mejores y más aptos.

Constituye un acierto insuperable la organización de un amplio curso-de orientación profesional, sobre todo por 16 que se refiere a los estudiantes de Leyes, porque el título de Abogado, a diferencia de otros títulos" como los de ingenieros, arquitectos, incluso médicos, pocas veces constituye por sí sólo un fin : en la mayoría, de" las ocasiones es1 tan; sólo un medio, un instrumento indispensable y preliminar para llegar a la meta definitiva de una actividad profesional.

De ahí la conveniencia, mejor sería" decir la necesidad, de que los1 universitarios conozcan de antemano ios rasgos .característicos, las ventajas e inconvenientes, la-cara y cruz.de cada profesión jurídica y puedan orientar precozmente susestudios en el sentido a quesu vocación les -llame,- pues hoy la especializaron sé impone cada vez con más apremio-en la inmensa selva de la legislación vigente," y la luchapor el "éxito, bajo la- forma de oposición, se hace cada día más empeñaday dura. Es buen sistema el de empezar a orientarse ya .en:1a- Universidad y profundizar en el estudio deaquellas disciplinas que la orientación exija.

Voces, muy elocuentesy autorizadas- explicaron -en ese.Curso lo" que son la Magistratura, el Notariado y la Cátedra, loque es el1 ejercicio libre de la profesión,1 lo que es la Abogacía del Estado;" y luego me correspondióa mídecir algo sobre otracarrera jurídica ? la de Registrador de la Propiedad, profesión a la que he dedicado mi vida entera; no-sólo en el desempeñó1 dé Registres,sino á través ".de mi actuación enlibros, conferencias "y monografías, en Tribunales de oposiciones en las Comisiones, ¡legislativasde que he formado y formo parte, en el ilustre Colegio Nacional de Registradores1 de la Propiedad dé España, acuya Directiva pertenezco hace años;; y lo que es más, dando,a la carrera dell hijo varón; que es tam- bien Registrador de.la-Propiedad)Page 366

II Finalidad del Registro yfunción del Registrador

La función del Registrador, eu síntesis, no -es otra que la .de aplicar la nial llamada Ley Hipotecaria, la cual no es, como su. nombre da a entender., una Ley que. sólo,trate de la hipoteca., -sino una, Ley que regula, ún poco al margen, del Código civil y conr preferencia sobre éste en cuanto afecta a los bienes registrados, el régimen jurídico!de la propiedad inmueble y de los derechos.reales inir puestos sobre la misma!

La Ley-Hipotecaria primitiva es de ,1861 -y hasufrido reformas,-más o menos profundas, en ,1869 y en 1944. S>u .objeto es asentar, sobre bases sólidas y seguras la transmisión del dominio de ¡os inmuebles 3 el-crédito territorial., Y para tales-fines, cuya importancia no-hace falta encarecer, creó un Registro jurídico de la propiedad, que vino a sustituir con notoria .ventaja a las insuficientes Contadurías de Hipoteca del siglo, xviii y primera mitad del siglo XIX.

El Registro moderno,, como .todoslos. crue descansan sobre, bases técnicas, se lleva.; por fincas y contiene, la historia íntegra de cada finca, pues .a. través de las sucesivas inscripciones de la titularidad, va reflejando todas las vicisitudes jurídicas del inmueble : ventas, permutas, herencias,- hipotecas, servidumbres, embargos... Si entre las partes contratantes y en lo que afecta al derecho obligacio-nal.rige el Código civil, en lo queafecta al derecho real, -al derecho erga o-mnes y a las relaciones con tercero, rige la Lev Hipotecaria ;. y- así, lo .que el Registro declara, lo, que; en sus. libros consta" inscrito, se presume que es exacto en beneficio del tercero que con buena.fe contrató sobre esaJ base registral, y es, mantenido en su adquisición aunque se anule o resuelva el derecho del transmitente. Este triunfo de la apariencia jurídica sobre la realidad jurídica -que .escandaliza alos noiniciados-, es debido a lafuerza que casi todas laslegislaciones modernas, eu particular la alemana" la suiza, la, australiana, conceden alprincipio de publicidad material, pues la pertenencia de los inmuebles y derechos- reales, lo mismo que sus transmisiones, no pueden ser conocidas eiú nuestrostiempos por.-el simple hecho posesorio, ya efue la posesión por sí scla no revela al verdadero dueño, y por ello la técnica ideó un sistema de publici-Page 367dad más perfecto y más espiritual: la inscripción en ún Registró0-oficial1 y público.

El Registrador esel funcionario del Estado encargado por la Ley de practicar las inscripciones en ese Registro y de ejercer ;el control previo para que los documentos que hayan de inscribirse reúnan todos los requisitos legales, pues así lo exige el principio dep-legalidad, y, además, para que la cadena de transmisores y adqui-rentes sea ininterrumpida, sin solución de continuidad, pues así lo exige a suvez el principio de tracto sucesivo El Registrador sirve al interés público y al mismo tiempo al interés, delos particulares1 que utilizan sus servicios técnicos. El Estado le nombra-y el parí" ticuíar le retribuye, pues el Registrador no percibe- sueldo sitió honorarios regulados por un Arancel.

El cargo de- Registrador es relativamente moderno,- si prescindí- mos de íus antecesores los Contadores de Hipotecas : faltan todavía- seis añospara que podamos celebrar el primer centenario. Pero des- de su creación, en 1861, hasta el día de hoy, su relieve lia aumentado en la misma medida y proporción que el sistema" se ha difúndido y en que las necesidades de la vida han obligado a-los propietarios a acoger sus fincas a los beneficios que la inscripción regístral.

III Primero, la-vocación

Solamente cuando la actividad del trabajo coincide con la voca-, ción, aquélla es provechosa y fructífera. Si nos vemos obligados á" hacer lo que no nos gusta, el resultado será nulo, por lo menos, insuficiente En cambió, si nuestro quehacer cotidiano nos satisface v armoniza con nuestro gusto; el trabajo de la de ser un castigo, sé convierte en un placer y su fruto es opimo y abundante.

Por ello, al enfrentarse la juventud con los proteicos caminos que1 la vida profesional jurídica ofrece, lo primero a que ha de atender es a su íntima y verdadera vocación. Sin- esa vocación no. habrá" Jueces,- Notarios; Abogadcs; Diplomáticos buenos ; habrá sí, profesiónales que cumplan su deber, pero sin entusiasmo, sin alegría1, sin efectiva comperietracióncon el cargo.

El problema estriba "en conocer-a tiempo cuál esla vocación, de1 cada lirio. Hay carrerasbrillantes que constituyen evidente señuelo para"Ín.si juventudes. El:: esplendor délForo, la publicidad de losPage 368 grandesdebates forenses,.,1a majestad de los. Tribu na les, la pompa y fausto de la diplomacia, el prestigio de los Cuerpos. Letrados y. Asesores de ,1a .Administración publicarla excelsitud-de la Cátedra y el. respeto 3 veneración que los Profesores inspiran, todo eso contribuye a.que los jóvenes se .sientan atraídos por.el bufete, por la Judicatura-, por la Diplomacia, por la Cátedra,-por la. Abogacía del Estado.

Pero el de Registrador de la Propiedad es un cargó.sin relumbre, ;sin, publicidad, sin aparato escénico alguno, de ejercicio callado, discreto; quizá .modesto.,Su actividad no discurre en;lá" solemnidad-, de los .Tribunales o en la opulencia de las modernas oficinas-del Es-i tado, orde las nuevas .Ciudades Universitarias, ui en la pompa dé. las Conferencias y Congresos internacionales. El, Registrador trabaja, la mayor parte de su vida en Jos ambientes rurales, alejados del atractivo imán de las grandes ciudades, en oficinas modestas, por-lo común- instaladas con excesiva humildad, en ocasiones con pobreza, y sus. instrumentos de trabajo.son viejos libros apergaminados, a veces polvorientos, v su clientela habitual Ja: constituyen -pequeños propietarios, huertanos,, masaveres, aparceros, gente rústica, .al- fin. y a, la postre.

Por este aparato exterior, poco halagüeño, pero verídico, es comprensible la dificultad de que nuestra carrera atraiga la vocación de la juventud, si sólo por las exterioridades se deja impresionar.

Y aun si se piensa en la especialización jurídica, en los textos legales que la profesión obliga a aprender y a aplicar, tampoco es fácil que la vocación juvenil se despierte. Hasta no hace mucho, por lo menos,- el solo nombre de Ley Hipotecaria era algo que. intimi- daba. Quizá por su complicación, per su dificultad, por ser a; modo1 de un álgebra jurídica, por deficiencias didácticas, ya que en las Facultades de Derecho no existía ninguna asignatura de Derecho Hipotecario, lo cierto es que se...

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