Orden IET/2598/2012, de 29 de noviembre, por la que se inicia el procedimiento para efectuar propuestas de desarrollo de la red de transporte de energía eléctrica.

MarginalBOE-A-2012-14837
SecciónIII - Otras Disposiciones
EmisorMinisterio de Industria, Energía y Turismo
Rango de LeyOrden

La política energética tiene como objetivos garantizar la seguridad del suministro, la eficiencia económica y la sostenibilidad medioambiental.

La planificación de las infraestructuras de transporte de electricidad y de gas natural así como de almacenamiento de productos petrolíferos es el principal instrumento del Gobierno para cumplir el objetivo de seguridad de suministro.

Las inversiones en infraestructuras eléctricas realizadas en los últimos 14 años han permitido que España cuente en la actualidad con un sector eléctrico de los más robustos del mundo en cuanto a seguridad de suministro se refiere. Así, la tasa de inversión media anual en la red de transporte de electricidad fue del 30,4 por ciento durante el período 1998-2011, mientras que la tasa de variación media anual de la demanda punta de electricidad en el mismo período fue del 2,8 por ciento. En particular, el crecimiento de las infraestructuras de transporte de energía eléctrica ha venido determinado por un crecimiento de la capacidad de generación en los últimos años muy por encima de la demanda, de tal forma que en 2011 el índice de cobertura de la demanda eléctrica fue del 1,29, superando ampliamente en la actualidad el umbral del 1,10 que se considera en general suficiente para garantizar la seguridad de suministro, y se prevé que siga siendo superior al 1,20 hasta 2020. Esta situación de exceso de capacidad se ha acentuado como consecuencia de la caída de la demanda de energía experimentada en los últimos años. A corto plazo se prevé una caída adicional de la demanda energética y en particular de electricidad durante 2012 y 2013.

De cara al futuro, el sistema energético se enfrenta a una importante transformación como consecuencia de restricciones de carácter tanto medioambiental como económico, y la planificación energética no puede ser ajena a dicha transformación. A la necesaria transformación de la forma en que se produce, transporta y consume la energía que impone la lucha internacional contra el cambio climático, se ha venido a añadir en los últimos años un contexto económico más restrictivo. En particular, y como para cualquier otro bien público, es necesario que la sociedad elija el nivel de calidad de suministro que quiere teniendo en cuenta el coste de la misma, lo que necesariamente implica la máxima transparencia del coste del suministro energético para el sistema.

La presente orden se dicta en el marco del proceso de reforma del sector energético español, que tiene como objetivos la suficiencia tarifaria y el equilibrio económico a largo plazo, por un lado, y la adaptación de los sectores eléctrico y gasista al nuevo escenario económico, racionalizando los costes e introduciendo mecanismos de eficiencia que permitan mejorar la competitividad de nuestra economía en general y de la actividad industrial en particular, por otro.

En este marco, la planificación de las redes de transporte de electricidad debe incorporar criterios de eficiencia económica y, además, debe tener en cuenta tanto el cambio de escenario macroeconómico, respecto del utilizado para la planificación energética actualmente en vigor para el período 2008-2016 y del que se previó en el proceso de planificación energética iniciado en marzo de 2010, como una serie de factores que afectarán a la evolución de la demanda de electricidad en los próximos años.

En este aspecto, es de particular relevancia la reciente aprobación de la nueva Directiva de Eficiencia Energética, cuyo principal objetivo es establecer un marco común para fomentar la eficiencia energética en la Unión Europea con objeto de asegurar que en su conjunto se alcance el objetivo de ahorro de energía primaria del 20 por ciento en 2020, de acuerdo con lo establecido en el Paquete de Energía y Cambio Climático. Estas medidas serán de aplicación a todas las demandas energéticas y modificarán, por tanto, las previsiones de las mismas que se utilizaron en los ejercicios de planificación anteriores.

Estas circunstancias han motivado el abandono del procedimiento de planificación energética en curso para el período 2012-2020 y el inicio de uno nuevo para el período 2014-2020, que tendrá en cuenta los nuevos escenarios descritos y posibilitará la transformación del sistema energético español de cara a cumplir los objetivos a 2020 en materia de eficiencia energética, energías renovables y medioambiente, así como poner al sistema español en la senda definida por la Comisión Europea para 2050 y cuyo paso intermedio vendrá determinado por el resultado de las actuales negociaciones que están llevando a cabo los Estados miembros para fijar el marco para 2030 en materia de energía y cambio climático de la Unión Europea.

La nueva planificación deberá, asimismo, tener en cuenta que en las próximas dos décadas el entorno en el que operará la red eléctrica sufrirá cambios sustanciales, consecuencia de una serie de factores. En primer lugar, es previsible que la participación de las fuentes renovables en la generación eléctrica siga aumentando. En este sentido, el correcto mallado de la red jugará un papel esencial en la integración de una mayor cantidad de generación eléctrica de carácter intermitente. El mallado de la red eléctrica también será...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR