Introducción al libro
| Autor | Gustavo Toledo Lara |
| Cargo del Autor | Coordinador |
| Páginas | 13-18 |
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Introducción al libro
En las sociedades democráticas, no debe haber cabida al pensamiento único
ya que la pluralidad y la representatividad permite identicar la variedad de postu-
ras y de puntos de vista. Esto se debería generar a partir del debate, de la conver-
gencia y de la divergencia de las ideas. Sin embargo, para que ese debate se revierta
en forma de líneas de acción favorecedoras para todos, indiscutiblemente hay que
reconocer la necesidad de construir el criterio propio lo cual servirá al momento en
que se perlen aquellas líneas de acción que, en efecto, respondan en su caso a las
necesidades. Por lo tanto, la formación, la socialización del conocimiento y el acer-
camiento a los elementos de perspectiva normativa, pueden ser un gran punto de
partida siempre que lo dogmático no sea el patrón por el cual se discriminen ideas
diferentes. En síntesis, la diversidad y la pluralidad son elementos indispensables
del contexto democrático.
Las sociedades modernas también han vivido hechos que han generado
profundas y heterogéneas transformaciones a todo nivel. Ante esta realidad, se
ha de reconocer un conjunto de desafíos que si se quiere implican momentos ál-
gidos que ponen a prueba la convicción democrática. Hablamos por ejemplo del
crecimiento de la población, la globalización y la redenición de la idea de Estado,
la multiculturalidad, el aumento de los niveles educativos, la participación en los
procesos electorales, las contracciones económicas, la pobreza, la sociedad de la
información y el conocimiento, los derechos civiles, políticos y sociales.
Siempre resultará útil aproximarnos a diversas lecturas y análisis desde
múltiples perspectivas. Las voces críticas que constantemente reclaman un cono-
cimiento real, tienen como principal argumento que en efecto el conocimiento
necesita parecerse lo más posible al mundo en el que vivimos, precisamente para
asegurar ese encuentro entre el contexto y el saber, solo que ese encuentro debe
generarse bajo ciertos estándares que posibiliten la socialización del conocimiento
sin dejar de respetar la identidad disciplinaria y sus características denitorias.
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