Introducción

AutorMargarita Miñarro Yanini
Páginas17-20
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INTRODUCCIÓN1
En los últimos tiempos, la cifra de personas que, afectadas por los
múltiples conflictos que asolan este mundo convulso, buscan asilo en
otro Estado seguro no cesa de batir records. Así, si ONGs y medios
alertaban en 2015 de que la oleada de refugiados no tenía precedentes,
el mismo titular se ha venido repitiendo en los años sucesivos, en un
continuo in crescendo. De este modo, los términos “asilo” y “refugiado”
se han colado en cotidianidad de esta otra parte más “privilegiada” del
mundo, revelándole una realidad ante la que no ha podido permane-
cer indiferente. No obstante, la reacción no ha sido homogénea, sino
más al contrario, se ha convertido en punto de división en el seno de
la sociedad y entre los Estados, enfrentando a aquéllos que consideran
que ha de hacerse el esfuerzo solidario requerido y los que lo rechazan
frontalmente. La Unión Europea, pese a cierta pose demagógica, ha
mostrado sus cartas significándose con la adopción de muy contro-
vertidas decisiones dirigidas a externalizar y apartar “el problema”,
que revelan el perenne espíritu mercantilista de la Comunidad y hacen
cuestionarse el valor de la solidaridad expresado en su texto funda-
cional. Además, el fracaso definitivo del sistema de cupos que estable-
ciera por Decisión 2015/1601, de 22 de septiembre de 2015, ha dejado
irresoluta esta cuestión, que sigue abierta como una herida con mal
pronóstico de curación.
Estos posicionamientos limitativos y de rechazo en absoluto concilian
con la importancia y el sentido del derecho contra el que se dirigen.
Así, el asilo es un derecho humano y fundamental, lo que implica que
1
En esta obra se hace uso de los términos “refugiado” y “beneficiario” como nociones
generales, en referencia a las personas refugiadas o beneficiarias –expresión que, no
obstante, también se utiliza cuando el contexto lo hace propicio–, con objeto de dar
agilidad al discurso así como de diferenciar las referencias genéricas de las específica-
mente referidas a las mujeres refugiadas.

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