El derecho y la justicia

AutorTasia Aránguez Sánchez
Cargo del AutorCoordinador
Páginas126-156

CAPÍTULO IV
EL DERECHO Y LA JUSTICIA
La palabra latina “ ”, de donde emana el adjetivo “jurídico”, remite a
la expresión “iustitia” (justicia).
en sus respectivas definiciones, como pone de manifiesto la ex-
presión: “¡No hay derecho!” (Ruiz Resa, 2016). La teoría de la justicia
ha sido históricamente el principal ámbito de investigación de la
, pues la justicia es el motor de la experiencia jurídica.
La justicia es el valor desde el que se enjuicia el derecho positivo y el
valor que inspira su transformación y desarrollo. La relación entre la jus-
ticia y el derecho es tan estrecha que incluso se habla de la “Administra-
ción de Justicia” en referencia al conjunto del poder judicial. Por su
parte, los “Tribunales de Justicia” aluden al lugar donde se encuentran
los jueces y tribunales. Siempre se ha considerado que
El conjunto del sistema ju-
rídico solo puede mantener su eficacia sobre la presunción de que las
normas y resoluciones jurídicas persiguen la justicia.
La práctica de la abogacía siempre estuvo teñida por la acusación de
prestar más interés al lucro personal que a la búsqueda de la justicia. Sin
embargo, en el mundo romano estaba muy mal visto dedicarse a la abo-
gacía solo por afán de lucro. El jurista Quintiliano, inspirándose en las
ideas de Cicerón, enunció una definición del abogado/orador como “vir
bonus dicendi peritus”. Es decir, un abogado debe ser “un hombre
bueno y experto en el discurso”. La filosofía romana defendía una
, la vocación por la
profesión y el compromiso con la calidad de las instituciones políticas.
Quintiliano recomendaba a los abogados adaptar el precio a las posibi-
lidades de los clientes, seleccionar exclusivamente causas justas y no liti-
gar movidos por pasiones vengativas. Los célebres abogados romanos
Cicerón y Quintiliano aconsejaban preparar mucho los casos, conocer
bien el derecho y mentir solo cuando eso estuviera justificado por la
justicia de la causa y por la defensa de una verdad más profunda. Pese a

la extensión actual de ideas mercantilistas sobre la profesión, en el
mundo actual muchos abogados y abogadas (y otros profesionales del
derecho), conciben su trabajo como el uso de la argumentación jurídica
al servicio de la justicia.
Con respecto a la relación entre la justicia y el conjunto del ordena-
miento jurídico, desde el siglo XX ha habido dos posiciones teóricas di-
ferenciadas: el sostiene que un orden normativo injusto
no puede denominarse derecho, mientras que el
sostiene que lo único determinante para que exista derecho válido es que
haya sido aprobado siguiendo el procedimiento adecuado. Por tanto,
según el positivismo jurídico, el derecho puede ser justo o puede ser in-
justo; mientras que el iusnaturalismo afirma que la justicia es el requisito
para la validez del derecho, así como la finalidad del mismo y el criterio
que nos sirve para evaluarlo moralmente.
En la antigüedad, el debate sobre la relación entre la justicia y el derecho
enfrentó a Sócrates y a los sofistas. Los sofistas sostenían que las leyes de
una sociedad son una convención humana sin relación con valores éti-
cos. Para Trasímaco y Calicles, el derecho positivo era producto de la
imposición de los más fuertes. Sin embargo, Sócrates y su discípulo Pla-
tón, defendieron que la justicia debe inspirar las normas jurídicas.
1. ¿QUÉ ES LA JUSTICIA?
El término latino “ius” hace referencia a “ ”, asociado con “ius-
sum” (lo mandado) y con “iustum” (justo).
. El término comenzó siendo una
traducción del griego “diké”, que se refería a una justicia cósmica o uni-
versal que refleja el , la armonía de cada uno de
los seres, donde cada elemento encaja con los demás. El orden de la
“physis” (naturaleza) incluye dentro de sí el orden de la polis. La justicia
se asocia también al acatamiento de lo mandado, las leyes “nomos”.
Conforme los pueblos griegos fueron entrando en contacto con otros
pueblos, descubrieron la gran variedad normativa y ello condujo a cues-
tionar la vinculación entre el orden natural “physis” y las leyes “nomos”,
que pasaron a considerarse fruto de la convención humana en sus

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR