Il commercio. Saggio di economía del Diritto, de Gerardo Santini.

AutorJosé M. Piñol Aguadé
Páginas1119-1121

    SANTINI, GERARDO: Il commercio. Saggio di economía del Diritto. Ed. «Il Mulino», Bologna, 1979.

El ensayo, del que pasamos a ocuparnos mediante una «recensión de recensiones», ostenta un subtítulo calificado de ruptura, de vanguardia o no conformista, y parece devolvernos a la Bolonia en la que hace casi Page 1120 un milenio se encendió aquella antorcha de cultura jurídica que ha perdurado siglos y sigue todavía viva, iluminando. Bononia docet, pero también despierta inolvidables recuerdos, imágenes de indeleble esplendor cromático.

Su cielo en invierno es tan plomizo, que el azul llega a parecer una fantasía. Por su antiquísimo trazado los soportales se deslizan en sinfonía que parece infinita. Sólo ocasionalmente la monotonía se interrumpe con puestos de flores o exuberancias mercantiles: aquí unas mesas ofrecen libros bajo un precavido rótulo: si prega ai signori latri di libri di jare vía. No lejos, los muros del Archigymnasio todavía proclaman nombres y emblemas de los que ostentaron capitanías jurídicas de naciones peninsulares y ultramontanas en siglos de esplendor. En otros, centrales, nombres de miembros de unidades militares que se negaron a luchar y fueron exterminados reclaman, en relaciones inacabables, honor y gloria, mientras, no lejos, vergonzantes y olvidadas, en capilla de la Virgen de Loreto, poblada de telarañas y mustias flores, otras extensísimas nos hablan de los que murieron combatiendo en el espacio aéreo. Más allá, el Colegio Español exhibe orgulloso su ranciedad, su linaje, límpida prosapia que retornó a pretéritos y esplendorosos niveles bajo el dilatado rectorado de Evelio Verdera. Los «corteos» constantes, forzados, tristes, oficialistas, extraparlamentarios o de la contracultura, hacen inolvidable quién detenta el poder desde la última guerra. Hasta «Vocatio», con sede en la ciudad y cuya misión religiosa parecía limitada a acoger clérigos afectos de «mat de femme» y reclamar para la Iglesia latina idénticas normas que la oriental, parece desmadrarse y adoptar como divisa el coito, ergo sum. Los contrastes intelectuales, morales y hasta emocionales son profundos y en ocasiones se siente el límite del rien ne va plus. Pero pese a todo, las raíces boloñesas crecen y crean constantemente.

Con la postguerra y en un intento de lucha contra un cultura jurídica a la que supone en crisis por haber perdido todo contacto con la realidad! y vivir recluida en una turris eburnea de tradiciones e institutos desplazados o superados, aparece el movimiento Il Mulino, con su revista y editorial, y a cuyas modernas promociones pertenece Santini y se encuadra su citada obra. Su singularidad es tan considerable, que en un mismo número de la Rivista Trim. di Diritto e Proc. Civile, el 3 de 1980, se insertan dos amplias recensiones firmadas por Francesco Galgano y Giuseppe Auletta, Ordinarios de las Universidades de Bolonia y Catania, y el primero, además, Director, y también el más destacado colaborador del monumental Tratatto di Diriíto commerciale e di Diritto publico dell'econoinia, del que al redactar estas notas han aparecido los tres primeros volúmenes, de los que nos hemos ocupado en esta sección.

El acontecimiento, excepcional, invita a transformar la habitual reseña directa del libro en un resumen...

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