Un balance de la relación intelectual con Juan Ruiz Manero

AutorJosé Juan Moreso/María Cristina Redondo
Páginas187-188
VI
UN BALANCE DE LA RELACIÓN INTELECTUAL
CON JUAN RUIZ MANERO
Juan RUIZ MANERO traza en su trabajo un balance de su larga relación
intelectual con ALCHOURRÓN y BULYGIN. En lo que a mí se refiere, debo
decir que la relación intelectual con Juan ha sido muy agradable y prove-
chosa para mí. Me acuerdo de mi primera visita a Alicante en 1990 cuando
RUIZ MANERO me entregó el manuscrito de su libro Jurisdicción y normas.
Lo leí con verdadero placer no exento de envidia: pensé secretamente que
era una lástima que el libro no hubiera sido escrito por mí. No estuve, ni
estoy de acuerdo con todo lo que dice allí Juan, pero el libro es de una
gran profundidad y elegancia. No en vano lo utilicé en varias ocasiones
como texto de seminario en Buenos Aires.
Otro recuerdo grato fue el de las interminables discusiones que man-
tuvimos con motivo del simposio kelseniano de 1991, organizado por la
inolvidable amiga Leticia GIANFORMAGGIO, discusiones peripatéticas en
claustros de la abadía de Pontignano o sentados en un bar de Siena. Sin
mencionar los numerosos encuentros en distintos lugares en ambos lados
del océano, en Alicante, en Barcelona, en Buenos Aires, en Vaquerías o
en Bahía Blanca.
Todo esto no quita que mi amigo Juan está levemente equivocado en
algunos puntos centrales de la teoría jurídica, como tuve la oportunidad
de señalar por escrito en varias ocasiones. Especialmente pernicioso me
parece su apego a las creencias de los juristas que suelen ser muy equi-
vocadas. Un ejemplo clásico es uno de los más grandes juristas y filóso-
fos del derecho, Hans KELSEN, quien creía ver lagunas donde no las hay

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