Tecnologías disruptivas que están transformando los despachos

AutorvLex

La tecnología ya está cambiando el modo en el que trabajamos como también está cambiando el mercado y la captación de clientes. No hace falta imaginar escenarios de ciencia ficción para dejar entrar en el despacho las tecnologías más disruptivas que van a hacer de nuestro despacho un negocio más competitivo. Esta es una materia que cada vez más preocupa a los despachos de todos los tamaños, como pudimos ver en el pasado Congreso de la Abogacía 2019 y más recientemente en el Congreso de la Abogacía de Málaga, que hizo un especial hincapié en la transformación digital del sector jurídico. En este artículo, haremos un repaso a las tecnologías que los despachos profesionales ya están utilizando, bien para aumentar la seguridad de sus datos, impulsar su negocio o mejorar el ejercicio de la profesión ¿Has probado ya en el despacho alguna de ellas?


Inteligencia Artificial y tecnologías de aprendizaje automático

La I.A es la base de muchas de las soluciones actualmente disponibles para los despachos. Los algoritmos de una máquina entrenados son capaces de buscar datos con una impresionante precisión, hacer predicciones en función de los datos públicos de los juzgados o incluso tomar decisiones hasta ahora reservadas a los profesionales. Que nadie se asuste, pues la inteligencia artificial está aquí para ayudar al abogado y no sustituirlo, y por tanto las máquinas están destinadas a hacer por los humanos las tareas repetitivas, que llevan demasiado tiempo o que son más administrativas que jurídicas.

En especial, están destacando los asistentes jurídicos virtuales basados en I.A que permiten, sin ningún conocimiento técnico previo, aplicar la inteligencia artificial al trabajo diario del despacho. En el pasado Congreso de la Abogacía, vLex presentó sus dos innovadores asistentes:

  • Vincent, que analiza todo tipo de documentos jurídicos, ya sean escritos por el usuario u otro tipo, como por ejemplo, sentencias, y detecta en ellos automáticamente todas las citas legales. A partir de aquí, Vincent permite acceder a documentos parecidos o relacionados, lo que permite realizar búsquedas contextuales que ahorran tiempo y esfuerzo. Según palabras de Jorge Morell, experto en tecnología y derecho en Legaltechies, Vincent tiene un potencial enorme y el futuro de los asistentes virtuales un futuro prometedor.
  • Eunomia, que permite planificar y gestionar procedimientos jurídicos. El asistente muestra los pasos, los plazos y la documentación necesaria para un procedimiento concreto, así como documentos e información contextualizada para cada fase del procedimiento mediante inteligencia artificial, como puede ser jurisprudencia, modelos de demandas, artículos doctrinales o fichas prácticas extraídas de la base de datos de vLex.


Ciberseguridad

Tras los ataques sufridos durante el 2018 a la web de la Fiscalía General del Estado, el ataque a la plataforma LexNet, así como los avisos de seguridad emitidos por la Abogacía Española, la protección de datos sensibles seguirá siendo una de las principales preocupaciones de los despachos profesionales. En este ámbito, los gestores de despacho siguen siendo una de las principales herramientas para mantener la seguridad, pues mantener todos los datos en un formato físico o simplemente almacenados en un equipo informático no es suficiente para hacer frente a las amenazas de robo de información.


Tecnología cloud y almacenamiento de datos

El uso de la nube en los despachos se presenta como la mejor opción para mantener a salvo todo lo que necesitamos para los casos de nuestros clientes. Además, la nube también permite recuperar la información en cualquier lugar, lo que permite acceder a ella sin estar en el despacho o, incluso, sin estar delante de un ordenador. En un sector en el que la movilidad tiene una gran importancia, el rápido acceso a la información marca la diferencia. En este ámbito, los Saas (software as a service) seguirán siendo el tipo de software preferido por los profesionales del despacho, ya que se tratan de programas que no quieren instalación en el ordenador y pueden ser ejecutados a través del navegador, ya sea en un ordenador, una tablet o un móvil.


Chatbots

Según Jordi Fernández, director de Comunicación de Cuatrecases, 2019 es el año de los chatbots. En los últimos tiempos han proliferado diferentes aplicaciones aplicadas al ámbito legal que son capaces de dar respuestas rápidas a cuestiones legales sencillas. Su objetivo es mejorar el servicio y la experiencia del cliente, en palabras de Fernández, pero también aumentar la productividad y eficiencia de los profesionales del derecho. Por un lado, el cliente potencial obtiene una respuesta rápida a su petición gracias al chatbot, lo que puede desencadenar en una petición de servicio al profesional o no. Por tanto, los chatbots realizan esa ardúa tarea de filtrar entre todas las peticiones y discernir entre aquellas que se convertirán en nuestros clientes y las que no, bien porque el usuario está solicitando unos servicios que nosotros no podemos dar o porque simplemente se ha equivocado al solicitarlos.


Smartcontracts

Aunque el sector de los smartcontracts y Blockchain es relativamente reciente, los juristas ya están debatiendo sobre su regulación. Los llamados smartcontracts, construyen contactos en los que las condiciones son del tipo “Si ocurre A, haz B, si ocurre C, pasará D”. Esta automatización elimina la intervención humana y la descentralización de Blockchain hacen el resto para convertir a estos contratos en seguros, válidos y automáticos.


La tecnología, al fin al cabo, permite dedicarse a lo realmente importante en el despacho mientras la máquina realiza aquellas tareas que más lastran. Nuestros clientes de Quolaw ya saben qué es trabajar centrándose en sus clientes y en sus casos, pues el gestor de despachos se encarga de almacenar y mantener seguros los datos de sus clientes, de llevar las cuentas del negocio y, además, de funcionar como soporte al abogado gracias al asistente Eunomia, la calculadora de plazos Lexpire o la integración con la base de datos de vLex.

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