Prólogo
| Autor | José Antonio Martín Pallín |
| Cargo del Autor | Abogado y comisionado español de la Comisión Internacional de Juristas (Ginebra). Ha sido Fiscal y Magistrado del Tribunal Supremo |
| Páginas | 11-18 |
Prólogo
El libro que tienes en tus manos es la obra de Julio Picatoste Bobillo, un
magníco jurista, un excelente escritor y ante todo un ejemplar ciudadano.
Además, es mi amigo. Encarna todas las virtudes que le hacen sobresalir en-
tre el común de los que componemos eso que denominan el cuerpo social. Su
sagacidad y profunda calidad humana que generosamente comparte con sus
amigos, compañeros y ciudadanos le dotan de unas cualidades que escasean
lamentablemente en el territorio profesional al que ha dedicado una parte de
su vida. A las personas que han decidido orientar su vida profesional hacia
el mundo de la justicia, asumiendo la potestad de juzgar y hacer ejecutar lo
juzgado, les recomiendo la imprescindible lectura de este libro que tengo el
honor y el privilegio de prologar. Encontraran, sin duda, valiosos materiales
y agudas reexiones, no exentas de rasgos humorísticos que le facilitarán su
lectura. Nos encontramos ante una compilación del pensamiento y de los
conocimientos jurídicos que atesora el autor que ha querido compartirlos y
trasmitirlos a toda la sociedad más allá de los recintos cerrados de los pom-
posamente llamados Palacios de Justicia y que ahora, con mayor coherencia
y rigor constitucional, han pasado a denominarse Ciudades de la Justicia.
Sus conciudadanos le deben un reconocimiento por sus continuas apor-
taciones a la cultura, factor que enriquece y hace mejor a una sociedad que
tiene el privilegio de conocer sus escritos, sus iniciativas y su desinteresada
colaboración con cualquier impulso dedicado a la difusión del conocimiento
y de las ideas. Su biografía estará indeleblemente unida a las actividades del
Club Faro de Vigo, institución que ha dotado a la ciudad de un foco que ha
servido para proyectar las ideas, los conocimientos y las actividades de las
ciencias y de las artes de las letras. Siempre he disfrutado del apoyo y de la
compañía de Julio en las varias ocasiones en las que he sido invitado por
nuestra común amiga Marisa Real, alma mater de la institución.
Siempre ha compatibilizado su función judicial con la enseñanza uni-
versitaria en la que ha destacado como profesor, en las Escuelas de práctica
jurídica de Santiago de Compostela, Gijón y Vigo. Académico de la Real
Academia Gallega de Jurisprudencia y Legislación, sus escritos y sus ense-
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