‘Mirvaso’, novedad específica frente a la rojez de la rosácea

El próximo medicamento en unirse al arsenal contra la rosácea tendría como peculiaridad que es el primero que se dirige a su componente vascular. Se trata de Mirvaso (brimonidina en gel a concentraciones de 3 mg/g, de Galderma), aprobado por la EMA hace unas semanas y que espera su aterrizaje en España. Los expertos destacan que esta terapia se suma a un amplio abanico de terapias, que incluye el láser, y que el tiempo y el uso determinará su lugar y eficacia en la práctica clínica.Su autorización se basa en los resultados en 553 pacientes en dos ensayos clínicos de un mes de duración que compararon su eficacia frente al vehículo del gel solo. Asimismo, en enero aparecían en Journal of Drugs in Dermatology las conclusiones de un estudio de un año de duración en 449 participantes con la enfermedad y eritema de moderado a severo que avalaban su eficacia.LÁSER, ÚNICA ALTERNATIVALa rosácea comprende varias fases, y una de las primeras suele ser el rubor, explica la jefa de Sección de Dermatología del Hospital 12 de Octubre, de Madrid, Aurora Guerra. Las sofocaciones persistentes pueden derivar en telangiectasias en mejillas, nariz y mentón. Pero, mientras que ya había medicamentos para las fases inflamatorias y la eliminación de pústulas, el aspecto rojizo sólo podía mejorarse con láser dirigido contra esas arañas vasculares. Este fármaco, que es un agonista del receptor alfa-2 adrenérgico, "reduciría el color rojo al producir un efecto sobre los vasos sanguíneos muy intenso". "Como toda novedad, es un medicamento que estamos esperando con bastante ilusión", afirma el presidente de la Academia Española de Dermatología y Venereología, José Carlos Moreno. Los resultados, hasta la fecha, le parecen "prometedores", aunque echa de menos el que no exista experiencia española: "Esperamos que no sean distintos a la que aportan los estudios clínicos". Además, advierte, "salvo posible intolerancia local, ya que las pieles afectadas por rosácea no siempre aceptan bien los tratamientos tópicos, no parece que tenga ningún otro tipo de contraindicaciones", resalta Moreno. El que los datos hasta la fecha sólo sean frente a placebo sería una limitación, a juicio de Ramón Grimalt, profesor de Dermatología en la Universidad de Barcelona y la Internacional de Cataluña. Por contra, destaca el interés de que se cuente con información a largo plazo, ya que en enfermedades de la piel crónicas sería un problema frecuente la pérdida de efecto al cabo de un tiempo. El...

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