Asier, el primer hombre víctima (por senten-cia) de violencia machista

La última vez que Asier les envió un WhatsApp, les decía: "Tranquilos. Estoy bien". Eran las dos de la madrugada y el joven de 28 años había querido hacer una parada en la Semana Grande de San Sebastián para pasar unas horas con sus amigos de Urnieta, su pueblo, antes de desplazarse a Soria, a la casa de los abuelos. Quitaron el sonido a los móviles y descansaron tranquilos toda la noche. En la retina aún permanecía el azul intensísimo del mediterráneo que se avista desde la atalaya alicantina de Benissa; en la cabeza, los gritos de alegría de los niños en la piscina cuando su tío se metía con ellos, aplazando el desayuno para no perderse ni un segundo de sus juegos y llenando el espacio desde el agua hasta el cielo de su risa contagiosa. No sabían que ese sería el último recuerdo que podrían almacenar de todos ellos, la familia junta, los 11, apiñados y felices. El móvil de Yoana, su hermana, volvió a sonar a las siete de la mañana para advertirle no se qué de una operación a la que le estaban sometiendo. Todo era confuso e imposible. Después sabrían que a las cinco de la mañana un tal Jonathan Lorenzo, celoso porque Asier tonteaba con Patricia, su ex novia, le había soltado un puñetazo de tal potencia que lo había sentenciado. Tardó 61 tristísimos días en morir. El viernes pasado su familia logró que al agresor, condenado a 13 años de prisión, se le aplicase la agravante de género contenida en el artículo 22 del Código Penal. No hay precedente y la decisión, tomada por un jurado popular y ratificada por una jueza, ha abierto un camino sujeto a una enorme controversia. Porque hasta ese momento se consideraba que esa agravante sólo podía ser aplicada a los agresores de mujeres y porque el siguiente objetivo de la familia de Asier, que es la modificación de la Ley Integral Contra la Violencia de Género "para que reconozca a las víctimas colaterales, sean mujeres u hombres", va a ser contestada por quienes defienden que esta norma está concebida para garantizar la discriminación positiva a favor de las mujeres.La sentencia, emitida por la Audiencia Provincial de San Sebastián, sustenta con su relato lo que Yoana y Juanjo, los hermanos de Asier, venían argumentando, es decir, que su hermano fue víctima de "un ataque machista", dado que Jonathan "lo mató para hacer daño a Patricia". Asier, el chaval familiar, generoso -"si tenías que pintar la casa allí le tenías"-; trabajador -"acababan de hacerle fijo"-; deportista -"se había gastado un...

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