Artículo 50

AutorAdrián Celaya Ibarra
Cargo del AutorProfesor emérito de la Univ. de Deusto

La posibilidad de revocación ha sido el tema más polémico en torno al testamento mancomunado. Se hace difícil admitir la revocación libre, que burla una voluntad concordada, pero tampoco se puede violentar la libertad de testar sometiéndola a una irrevocabilidad definitiva.

Las legislaciones que admiten el testamento mancomunado adoptan una de estas tres posiciones:

  1. Todo testamento mancomunado es libremente revocable. Esta es la doctrina establecida en Derecho castellano antes del Código civil, basada en que el Fuero Real no se refería para nada a la revocación, por lo que siendo todo testamento revocable por esencia, no hay razones para excepcionar este caso. Sin embargo, se denunciaron muchos abusos del poder de revocar.

    Una moderación de este sistema consiste en establecer la obligación de notificar al otro cónyuge la voluntad de revocar, como hacía el Código alemán.

  2. Todo testamento mancomunado es irrevocable, dado que sus disposiciones son recíprocas y correspectivas, por lo que sólo pueden ser modificadas de común acuerdo.

  3. El testamento mancomunado es revocable si no contiene disposiciones correspectivas e irrevocable si las contiene, es decir, cuando deba entenderse, como dispone el Código alemán, que la disposición de uno de los cónyuges no se habría otorgado sin la del otro (§ 2270).

    El Fuero de Bizkaia tenía en esta cuestión un criterio original: si uno de los dos cónyuges fallece dentro del año de su otorgamiento, el testamento es irrevocable, en otro caso, sus...

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