Vulnerabilidad de las personas mayores ante la brecha digital: análisis bibliométrico
| Autor | Dra. Andrea Cívico Ariza/Dra. Teresa Linde Valenzuela/Dra. Erika González García/Lauren Marie Basgall |
| Cargo del Autor | Universidad Internacional de Valencia/Universidad de Málaga/Universidad de Granada/Universidad de Málaga |
| Páginas | 223-239 |
Página 223
ISBN: 978-84-1122-405-5
Capítulo 12. Vulnerabilidad de las personas mayores
ante la brecha digital: análisis bibliométrico
Dra. Andrea Cívico Ariza
Universidad Internacional de Valencia
Dra. Teresa Linde Valenzuela
Universidad de Málaga
Dra. Erika González García
Universidad de Granada
Lauren Marie Basgall
Universidad de Málaga
I. Introducción
Según Dorado et al. (2021) en España las personas mayores de 65 años
suponen un total de 9.218.381, siendo un 58% de esta cifra mujeres (INE,
2020). De forma que, podemos afirmar que el envejecimiento de la
población es una realidad en todos los países desarrollados y en especial,
tal como indica Domenech (2019) en el nuestro. En esta misma línea,
según el Ministerio de Sanidad (2020) en España la esperanza de vida se
encuentra en los 83,4 años, sin embargo, la tasa de natalidad ha decrecido
de forma drástica desde finales de los años setenta a la actualidad (Díaz y
García, 2018), provocando este hecho una inversión en la pirámide
poblacional.
Esta situación supone para la sociedad en general y para los gobiernos en
particular, tener que prepararse para asumir las necesidades de este
sector de la población. De todas ellas las que mayor atención reciben son
las referentes a la asistencia sanitaria y a la dependencia. No obstante, se
tornan esenciales los problemas derivados del aislamiento y la soledad que
padecen las personas mayores. Bustillo et al. (2022, 175) hacen especial
énfasis en que:
Situaciones personales que conjugan edad avanzada, ausencia de una
red familiar de apoyo y en ocasiones precariedad económica pueden no
incidir de forma directa e inmediata en la salud y en la capacidad de
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Avances y prospectiva en la protección jurídico-social de las personas en condición de
vulnerabilidad
Torres Fernández, C., Jerez Rivero, W., De la Serna Tuya, J.M. y García Vidal, M. (Eds.)
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autonomía de las personas, pero generan con el tiempo aislamiento social
y consecuencias negativas para la salud y para la capacidad cognitiva.
Estos son algunos de los hechos que convierten a las personas mayores
en un colectivo vulnerable en la sociedad de la información en la que nos
encontramos inmersos. Una sociedad conformada por personas a las que
constantemente les falta el tiempo para estar con los mayores y atender
sus necesidades.
Ante esta siruación la OMS recoge que se deben crear entornor acorde
con la edad de las personas a través de los cuales se permita
(Organización Mundial de la Salud, 2007; Bustillo et al., 2022):
1.1. Crear contextos favorables para la edad, utilizando para ello la
recopilación de orientaciones basada en esperiencias semejantes.
1.2. Conformar platafomas dónde puedan compartir experiencias
propias y recibir información.
1.3. Fomentar el desarrollo de la Red Mundial de Ciudades y
Comunidades Amigables con las Personas Mayores de la OMS.
Sin embargo, estas acciones carecen de sentido si no se trabaja uno de
los principales motivos por los que los mayores se encuentran en situación
de vulnerabilidad: la brecha digital. Siguiendo a Galera et al. (2018, p.219)
las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) deben permitir
que “las personas adquieran nuevas habilidades y formas de participar y
expresarse en una sociedad claramente interconectada”. Por lo tanto, nos
referimos a brecha digital cuando existe una desigualdad latente respecto
al acceso, uso y relevancia de las tecnologías a nivel social.
En una sociedad en la que todo avanza a pasos agigantados, es para las
personas mayores para las que el cambio ha sido más acelerado, ya que
han vivido épocas de grandes y rápidos avances a los que han tenido que
adaptarse. Sin embargo, la inmediatez y aceleración de la actualidad, hace
que los cambios se hayan multiplicado exponencialmente y el tiempo de
adaptación sea menor o inexistente en muchos casos. El nuevo contexto
les ha obligado a reaprender a hacer casi todo, en un momento
psicoevolutivo donde le cuesta más mecanizar ciertos procesos. A la falta
de conocimiento, hay que sumarle en muchas ocasiones un desinterés
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