Tratamiento
| Autor | Joaquim Homs Sanz de la Garza |
| Cargo del Autor | Doctor en Derecho por la Universidad Central de Barcelona |
| Páginas | 151-177 |
151
VIII
Tratamiento
Tratamiento clínico para sociópatas
y psicópatas
Nos unimos a la creencia de que con tratamiento
farmacológico se reduce la agresividad de forma notoria.
Creemos más inteligente tratar como enfermos sociales a
los psicópatas y obligarles a consumir determinados psico-
fármacos que reducen la agresividad, antes de ingresarlos
en una cárcel. Estudios de los españoles Dr. Aluja, Pons
Bertrán, Raine, Tobella, Borrás, Ortega Monaterio, Mir
Puig, Cordoba Roda, y de otros norteamericanos como
Hare, indican una base biológica en la conducta antisocial,
por lo que el tratamiento debe ser biológico.
La castración a violadores, realizada de forma con-
sentida por los mismos, como alternativa a la prisión, fue
un fracaso en los países que se aplicó, tal es el caso de
Alemania en los años 80 del siglo pasado. Fracasaron pues
CAPÍTULO
152
Joaquim Homs Sanz de la Garza
PSICÓPATAS, SOCIÓPATAS Y ANTISOCIALES
UN ESTUDIO DE LAS MENTES CRIMINALES
los violadores a través de testosterona artificial conseguían
nuevas erecciones y eyaculación prostática, aun si tener
testículos, con lo que podían realizar penetraciones.
Hoy en día disponemos de medicamentos que reba-
jan o anulan la libido, tales como la sertralina, mirtazapina
y otros medicamentos antipsicóticos. Pues bien, una alter-
nativa sería suministrar en vena dosis altas de medicamen-
tos, que anulen la libido e impidan que los delincuentes
sexuales vuelvan a delinquir.
El psicoanálisis es ineficaz en el tratamiento de las
psicofilias o parafilias. Los métodos conductistas son in-
útiles en psicópatas si no se realizan en centros especiali-
zados, los cuales no existen en España. La terapia de grupo
puede ser negativa, pues le sirve al psicópata para manipu-
lar a otros pacientes que participan en ella, por lo que no
la consideramos ajustada. La potenciación de los valores
del enfermo sería lo ideal para canalizar sus recursos.
Hasta 1975, en España, se permitía ingresar en la
Legión, sin acreditar la identidad. Ello era legal, en un sis-
tema no democrático, pero permitía «socializar» a deter-
minados psicópatas en el ejército. El sistema punitivo no
funciona, dado que el psicópata tolera bien el castigo y la
frustración. Los datos dados por Hare indican que reinci-
den.
Un caso muy conocido y tratado en conducta anti-
social es el de Vaquilla, delincuente que permaneció 43
años de su vida en prisión por reincidencia continuada.
Hay varias teorías sobre su conducta, alguna apunta a que
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