Ribas Alba, José M.ª, Introducción a la antropología jurídica romana
| Autor | Rafael Ramis Barceló |
| Páginas | 1094-1095 |
1094 Bibliografía
AHDE, tomo LXXXIV, 2014
do, especialmente en las excelentes conclusiones finales, a plantearse el significado en
un futuro de la autonomía, principio que informa nuestra configuración político-territo-
rial y en la actualidad se encuentra sujeto a una profunda revisión por las circunstancias
de la actualidad española.
C L C
RIBAS ALBA, José María. Introducción a la Antropología jurídica romana.
Granada, Comares, 2013, 125 pp. ISBN: 978-84-9045-025-3
Varios son los temas que el romanista sevillano José M. Ribas Alba ha cultivado, pero
dos son los que ha tratado con más ahínco en los últimos años: el proceso a Jesús de Naza-
ret y la antropología jurídica romana. En ambos ha sobresalido por su rigurosa documenta-
ción histórica y por su perspectiva novedosa. Después de un estudio de hondo calado sobre
la persona en Roma (Persona. Desde el derecho romano a la teología cristiana, Granada,
2012) el autor presenta una breve introducción a la antropología jurídica romana.
Se trata de un libro pensado para sugerir y evocar, mediante unos cuarenta epígrafes
breves, en los que se van enlazando varios temas centrales de la antropología clásica y
del derecho romano público y privado (la antropología del individuo y de la comunidad,
la transición de los grupos de parentesco al Estado, el matrimonio, las relaciones priva-
das…). No es una lista cerrada, sino un conjunto de temas variados que abarcan las
cuestiones más relevantes para lo que han sido después las categorías jurídicas más
socorridas. Ya avisa el autor en el prólogo que no se trata de un tratado o de un manual
(p. 9).
El profesor Cuena Boy (Revista de estudios histórico-jurídicos, 35, 2013, pp. 865-873)
hizo una elaborada recensión a la que poco puede añadirse y es osadía intentarlo. Sin
embargo, repensando algunas de las ideas de Cuena, cabe volver al concepto mismo de
«antropología jurídica», para mostrar el alcance y el acierto en la dirección del libro, así
como la necesidad de ahondar en esta perspectiva.
Indica Cuena que: «señalábamos al comienzo la dificultad de que el relato de un
romanista metido a antropólogo pueda ir más allá de informar acerca de las manifesta-
ciones jurídicas de una concepción antropológica subyacente así como, en su caso,
sobre algunos aspectos de esa concepción que puedan parecer especialmente marcados
por su origen jurídico. En nuestra opinión, en este libro de Ribas predomina el primer
aspecto, o sea, el esclarecimiento metódico de los cimientos de ciertas realidades del
mundo del derecho que cabría ver como brotes de aquella concepción antropológica
subyacente, global y unitaria. Del segundo hay menos pero lo que hay no es en absoluto
insignificante: la identificación de homo y humanitas como categorías de origen jurídi-
co, el peso determinante de las elaboraciones jurídicas en torno a la acción libre del
hombre y la voluntas o la atribución al pensamiento de los juristas del concepto de per-
sona y de la primera aplicación del mismo al ser humano» (p. 872).
Ciertamente, J. M. Ribas ha elaborado una buena guía para mostrar cómo detrás de
cada concepto jurídico romano subyace una base antropológica. El autor concibe la obra
como una «topografía del espíritu romano», escrita –creo– en tiempo de decadencia, en
el que la presencia del mundo grecolatino languidece en los planes de estudio. Y tal vez
sea más importante lo que sigue: el autor se hace eco de la importancia de la antropolo-
gía y de la nueva sensibilidad de los juristas hacia ella. Sin duda, libros como Justicia
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