La responsabilidad social empresarial

AutorMaría Isabel Garrido Gómez
Páginas127-161

Page 127

1. Las empresas como sujetos agentes

Los actores jurídicos han ido incrementándose a causa de la globalización y hoy día se habla, entre otros, de las empresas nacionales, multinacionales y transnacionales; de manera que se ha superado la idea de que solamente los Estados y los individuos pueden ser responsables jurídicamente, a lo cual hay que añadir que la promoción y defensa de los derechos humanos dentro del ámbito empresarial descansa en la autorregulación y códigos de conducta voluntarios. Y aquí es apreciable que no todos los derechos son equivalentes para las empresas, y que las pequeñas y medianas tienen igual responsabilidad en materia de derechos humanos que las grandes.

El mismo concepto de empresa transnacional no es unánime, esta modalidad empresarial realiza actividades económicas en sectores muy distintos lo cual hace que sean dotadas de un amplio poder económico y político. Pueden tener su domicilio en uno o varios Estados, en el de la empresa matriz, en el de la implantación principal o donde haya

Page 128

sido registrada, siendo la matriz la que tiene la responsabilidad última en la gestión de conjunto. La diferencia entre las empresas de naturaleza transnacional y multinacional recae en que los establecimientos secundarios y/o filiales de aquellas dependen de alguna forma de la matriz de origen, mientras que las multinacionales se administran de manera independiente en los países en los que tienen su sede1.

Las empresas fruto de la globalización son personas jurídicas, y su estructura se compone del core business con una red de filiales, proveedores, contratistas y subcontratistas situados en cualquier lugar del planeta. Ellas tienen una sede central y se rigen por las normas domésticas de los Estados en los que actúan y por las internacionales. Por tanto, la cuestión es cómo lograr que el Derecho internacional de los derechos humanos pueda ser aplicado a estas actividades2.

Esto se une con la idea de que el concepto de empresa le interesa al Derecho mercantil y al ámbito del Estado social y democrático de Derecho. En esta línea, el Estado promueve y exige a las personas que ejercen sus derechos a la libertad de empresa y perciben las utilidades que conlleva que cumplan con su función social, la cual se debe concretar principalmente en el mejoramiento de la calidad de vida de

Page 129

los ciudadanos, en la distribución equitativa de las oportunidades y los beneficios del desarrollo, y en la preservación de un ambiente sano. A lo que se une el hecho de que la dirección que deben seguir ha cambiado, y que sus acciones han de consagrar estándares éticos que satisfagan los intereses y las necesidades de diversos actores relacionados con las tareas desempeñadas3. En consecuencia, se mantiene por muchos que lo mejor sería aportar una visión integral de la empresa aunando lo económico con lo ético. Para un autor de la talla de Galgano, el concepto de economicidad objetiva es clave a la hora de determinar que la labor de un empresario se sujeta a la normatividad prevista4.

2. Concepto y evolución de la responsabilidad social empresarial

A raíz de lo dicho cabe hablar mejor de la responsabilidad social empresarial (en adelante RSE) y no de la responsabilidad social corporativa (RSC), puesto que este es un concepto más amplio que incluye a toda clase de

Page 130

organizaciones ya sean empresariales o no5, si bien es posible entender la RSE de muy variadas formas. Por ejemplo, primeramente podemos afirmar que la responsabilidad social es una motivación voluntaria, por lo que se reclama una actuación ética ajena a presiones legales o sociales. En segundo lugar, la responsabilidad social como obligación empresarial implica la necesidad que tienen las empresas de ser socialmente responsables, cumpliendo las normas legales y luego las impuestas por ellas. Y en tercer lugar, la responsabilidad social comporta un compromiso empresarial en todas las etapas de la dinámica del mercado, sentido en el que hay que hacer hincapié en la naturaleza ética y moral de la RSE.

En definitiva, la responsabilidad social es la respuesta que da un agente moral a los efectos de sus acciones al pro-mover el desarrollo humano de las comunidades con que interactúan, al menos, cuidando no generar impactos negativos en la sociedad o el ambiente, e incrementar la calidad de vida de las personas y comunidades de las que forman parte. A lo que hay que añadir que la RSE aparece como un tema de gestión y competitividad que sugiere esquemas involucrados en la cultura empresarial. Tema extensible al desarrollo de las prácticas responsables en las Administraciones Públicas y en las organizaciones públicas y privadas6.

Page 131

Teniendo en cuenta estos aspectos, se parte del cumplimiento de la ley vigente, es decir, que tiene en cuenta toda acción que supere los requisitos de las leyes y los convenios colectivos7. En consecuencia, la RSE implica superar los requerimientos legales. Desde este enfoque, una empresa es socialmente responsable según el grado del compromiso laboral y ambiental que adquiere. Así las cosas, involucra expectativas de la sociedad económicas, éticas y discrecionales. Las económicas se explican en el sentido de producir bienes y servicios que la sociedad requiere y venderlos con la adquisición de ganancias. Las éticas se enfocan sobre la realización de comportamientos y actividades conformadores de un plus empresarial que no precisan contenerse en la letra de la ley, pero que son esperados por la sociedad. Y las discrecionales se refieren al desempeño de actividades que no han recibido un mensaje social claro pero que, sin embargo, esperan ser asumidas gracias a su rol discrecional. Por tanto, la clave está en superar voluntariamente lo que dice la ley8.

Page 132

En síntesis, el concepto de RSE nos remite a demandas de la sociedad, a la respuesta que los núcleos empresariales realizan y a las implicaciones sociales que conllevan sus acciones. Esta es la razón por la que se refiere a temas como los derechos humanos, medioambiente, derechos laborales y ética empresarial9. Por consiguiente, siguiendo la visión integral de la que hemos hablado se diseñan temas básicos como los asuntos internos, las prácticas en el mercado y las exigencias sociales, de manera que una empresa estará legitimada socialmente si posee la capacidad de solucionar esas tres clases de conflictos que descansan en políticas empresariales basadas en la ética10.

Desde una perspectiva liberal, Friedman consideraba que la responsabilidad social de la empresa consiste en “utilizar sus recursos y desarrollar actividades diseñadas para aumentar sus beneficios siempre que respete las reglas del juego, es decir, participe de una competencia libre y abierta sin engaño o fraude”. Pero su punto de partida es que, propiamente, no se puede hablar de RSE ya que la responsabilidad es de los individuos. En este sentido, la responsabilidad recae en los ejecutivos corporativos que han de perseguir el aumento de beneficios, por lo que la realización de actividades sociales comporta no cumplir el cometido de los directivos respecto a los propietarios de la empresa,

Page 133

rompiéndose el deber fiduciario que tienen con respecto a estos y usando ineficazmente los recursos11.

Además, Carroll fue uno de los autores que más aportó a la significación de la RSE, dicho autor ideó un modelo centrado en el desempeño socialmente responsable por las empresas y definió cuatro categorías interrelacionadas. Dichas categorías son la económica, vinculada a las utilidades; la legal, que establece el cumplimiento de la normatividad que le compete en cuanto empresa que es; la ética, que se relaciona con el desempeño basado en valores y principios morales; y la discrecional, referente al juicio de cada empresa en dependencia de su contexto. Estas categorías no se excluyen mutuamente, apareciendo variados temas de interés en los que operar como el ambiental, la igualdad de oportunidades, el personal, la integración comunitaria, los productos, etc12.

Poco a poco, la RSE se ha ido desarrollando hasta ocupar un primer plano plasmándose en líneas diferentes. A nuestros efectos, una de las visiones de mayor calado es la referida a la defensa del modelo social, que afirma que la empresa tiene que dejar de considerar como única obligación la maximización de los rendimientos económicos de socios y/o accionistas, responsabilizándose respecto a la comunidad. Así, Dodd sos-

Page 134

tiene que la sociedad es la fuente de beneficios conseguidos de la gran firma moderna, la cual viene incentivada básicamente por la legislación. Otro autor que nos interesa es Bell quien entiende que la empresa se debe a la comunidad y no ha de operar de espaldas a ella siendo, por ende, necesario que en su planteamiento y ejecución no se obvie la satisfacción de los intereses patrimoniales de sus asociados, ni las expectativas de las necesidades de todos los grupos concurrentes a lo largo de su acción13. Desde este punto de vista, los Principios Ruggie, que estudiaremos más adelante, constituyen un desafío en términos de aplicabilidad.

La RSE comenzó en los años ochenta del siglo XX, y fue propulsada por el proceso económico globalizador y la permeabilidad informativa de los medios de comunicación y las nuevas tecnologías. En este sentido, se expandió la actividad económica gracias a la eliminación de barreras comerciales, y...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR