La relación con la sociedad
| Autor | Tomás Alberich Nistal |
| Páginas | 183-196 |
La situación de los movimientos sociales en España, se caracteriza por:
- Existen muchos recursos para desarrollar los fines asociativos.
- Existe una gran cantidad de asociaciones y de muy variado tipo: gran pluralidad y diversidad.
- Sin embargo, el sistema político está caracterizado por una democracia más formal y mediática que participativa y apenas se fomenta la creación de tejido asociativo, su fortalecimiento y coordinación. No se favorece la participación ciudadana y la democracia directa.
- Hay un gran desánimo en la población por participar y, especialmente, en implicarse activamente en asociaciones y movimientos sociales. Debido, por una parte, a las dificultades que se encuentran y la falta de confianza en el resultado que se va a obtener y, por otra, al fomento del individualismo y el consumismo. La participación se da más en actividades puntuales (protestas, reivindicaciones, actos lúdicos...) y en el voluntariado individual (acciones concretas de ayuda o solidaridad) y se da menos participación como implicación activa en las asociaciones de forma estable. Hay miedo a implicarse en la organización, en la "burocracia" interna (a pesar de asumirse que es imprescindible). Cuando se participa se quieren ver resultados inmediatos, lo cual no siempre es posible. Page 186
- El aumento del número de asociaciones pequeñas y con fines similares, ha sido potenciado por la política de subvenciones que introduce elementos de competitividad entre ellas y no favorece la coordinación y la cohesión. Esto trae como consecuencia que los movimientos sociales se encuentren, en parte, descabezados, potenciándose el minifundismo asociativo. Esta tendencia que se da a nivel local, convive con la que se da, en los últimos años, desde las administraciones públicas centrales (Ministerios, CC.AA., grandes ciudades....), de colaborar casi exclusivamente con las grandes ONG, federaciones o fundaciones reconocidas y con prestigio social (y que algunas de ellas cuentan con dirigentes bien reconocidos desde los respectivos partidos políticos gobernantes).
Independientes pero no neutrales, puede ser un buen lema para definir las relaciones que las asociaciones deben tener con el Estado y con las organizaciones políticas y económicas, en definitiva con el conjunto de las instituciones de la sociedad.
La actividad política es inherente a toda actividad pública, por lo tanto no se puede evitar.
Lo necesario es tener las ideas claras de cual es el papel de las asociaciones como parte de un "tercer sistema" (el denominado tercer sector), diferente de los otros dos más conocidos, el político-partidista-estatal y el económico-privado, pero estrechamente relacionado con ellos.
La conclusión es que las asociaciones deben hacer política pero no partidismo o política electoral-partidista. Por ejemplo, ante un problema social fruto de una negligencia administrativa, caben diferentes posiciones para una asociación:
-
Denunciar públicamente el mal funcionamiento de la administración sobre ese tema (sea del signo político que sea).
-
No denunciarlo, para "no hacer política". Page 187
Pero en este segundo caso también se está haciendo política: la de apoyar, por omisión, la acción de ese gobierno o administración, renunciando a una obligación social como asociación que trabaja por el interés general.
Igual ejemplo podemos ver en las relaciones con las empresas y el poder económico. Nos relacionamos con las sociedades lucrativas, podemos solicitarles patrocinios y colaboración, pero esto no nos debe de impedir mantener nuestra independencia y denunciar los hechos que consideremos injustos, negligencias, etc.
Las Asociaciones sin ánimo de lucro con recursos y servicios, incidimos en la creación de empleo como parte que somos de la economía social.
El ejemplo de otros países europeos, donde los servicios culturales y sociales están organizados en buena parte desde asociaciones o en colaboración con ellas, y el progresivo aumento del empleo en el sector servicios, especialmente en ocio y cultura y en servicios sociales de proximidad, abren nuevas perspectivas para las asociaciones.
Ello obliga a las asociaciones sin ánimo de lucro a mejorar la profesionalización de su gestión, a la vez que, dada la situación de paro de nuestro país, hace más interesante la propuesta de creación de "viveros de asociaciones" como forma de crear nuevas asociaciones y servicios y, por tanto, crear empleo.
Es conveniente la mejora de nuestras relaciones con empresas de la economía social realizando actividades conjuntas con cooperativas de trabajo asociado, de vivienda y de consumo. La economía social está formada por diversos sectores en los que prima el interés social y la creación de empleo en su actividad económica. Principalmente son: Cooperativas...
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