Pueblos indígenas
| Autor | Juan Guzmán |
| Cargo del Autor | Magistrado, Universidad de Chile |
| Páginas | 279-285 |
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El denominado descubrimiento de América en 1942, realmente no lo fue. América estaba poblada y, conforme a evidencias arqueológicas y antropológicas, sus habitantes datan de 30.000 años antes de nuestros días. Descubrieron este continente, llegando desde Asia durante la última glaciación que tuvo lugar hace 30.000 años, caminando por sobre los hielos que cubrían el Estrecho de Bering. Se han realizado, por otra parte estudios fidedignos que permiten concluir que hubo numerosas migraciones provenientes de la China y Japón en períodos más recientes, lo que se ha podido comprobar por más de un centenar de coincidencias culturales representadas a través de la arquitectura, objetos cerámicos y ornamentos de dichos pueblos asiáticos reproducidos por los pueblos México, Mesa-América y de la América Andina.
En todo caso, todo el continente americano estaba poblado por una sola migración constituida por numerosos pueblos.
Después de la llegada de los europeos a este continente, comenzaron las invasiones innecesariamente bélicas, en circunstancias de ser los pueblos originarios de América, en su mayor parte, pacíficos. Eran ya originarios puesto que, aunque provenían de Asia, en su continente de adopción desarrollaron durante milenios vigorosas culturas, creencias, actividades acordes con las características de sus suelos y minerales y utilizaron idiomas y dialectos suyos propios.
Sin embargo, los pueblos europeos comenzaron a ocupar estas tierras en nombre de los reinos de donde provenían y de la religión cristiana. En primer lugar, fueron anexando las tierras conquistadas a sus reinos y, en segundo, comenzaron la mal llamada "evangelización", imponiendo sus creencias, cultos y tradiciones, destruyendo sus templos y culturas e introduciendo sus religiones a la fuerza. Para efectuar esta "importación" que se extendió durante tres siglos, perpetraron los peores crímenes contra la humanidad, crímenes correspondientes a aquellos contenidos en numerosos tratados que están tipificados como crímenes de genocidio, lesa humanidad y de guerra.
Lo cierto es que los pueblos originarios o precolombinos constituían la raza netamente americana, aunque el vocablo "América" surge algunos milenios después de su instalación en lo que hoy es el continente americano, con una Page 280 raza, la cobriza, que está conformada por numerosos pueblos con características propias cada uno.
Los europeos invasores, obsesionados por el poder y el oro, introducen con sangre sus propias creencias religiosas y costumbres que se mantienen hasta la fecha con lo cual coartan la libertad de credo, de expresión y la cosmovisión de los pueblos originarios.
Los pueblos precolombinos eran nómadas algunos y, otros, sedentarios. Los primeros, cual es el caso de los de Chile, no dejaron construcciones monumentales, pero sí creencias, costumbres y lenguas ricas en belleza y poesía. Poseen una cosmovisión rica en simbología y otorgan a la naturaleza una importancia primordial. Algunos de estos pueblos, los que aún quedan, pues otros han sido exterminados, son los aymaras, quechuas, lican-antay, diaguitas y los mapuches. Como ejemplos de pueblos precolombinos, esencialmente sedentarios, podemos señalar a los mayas, los aztecas, los incas (aunque en realidad constituyeron la primera dinastía de los pueblos quechuas y aimaras) y los rapa-nui, entre otros tantos que dejaron vestigios de ciudades y monumentos de gran belleza.
Vamos a saltar unos cuantos siglos de historia para tratar de los indígenas chilenos y de su actual situación, dando una pincelada respecto de lo que podría considerarse como su sometimiento a los pueblos invasores, a los criollos y a permanentes migraciones europeas que se sucedieron durante estos...
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