Presentación

AutorJosé León Alapont
Cargo del AutorProfesor Ayudante Dr. de Derecho Penal Universitat de València
Páginas19-20
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El Derecho penal, como faz más representativa del ius puniendi que
ostenta el Estado, ha sido, es, y será, una importante herramienta de hacer
política o, si se preere, de «gobernar a través del delito». Y es que, no se nos
debe olvidar que la política criminal es una política más de las muchas que
componen lo que hoy denominamos acción de gobierno. El legislador, por
su parte, en ocasiones actúa como contrapoder; y, en otras, como cómplice o
cooperador necesario de los deseos en materia punitiva del ejecutivo.
Así pues, el equilibrio de intereses, las negociaciones, los compromisos
adquiridos, los pactos, las presiones, etc., hacen que el Derecho penal se preste
a tal juego. De suerte que la materia penal se convierte –no en pocas ocasio-
nes– en una máquina de propaganda al servicio de quien en un determinado
momento está en el poder. Cierto es que los penalistas, algunos guiados por
la fe ciega en la «buena dogmática penal» y, otros, más preocupados por los
límites y garantías constitucionales, no estamos acostumbrados a tales diná-
micas, pues, allí, todo se mide más en términos de ecacia y eciencia, del aquí
y ahora, del cortoplacismo.
De hecho, hoy en día, ni siquiera podemos armar que tras una u otra de-
cisión en materia político-criminal se esconda un componente ideológico más
propio de uno u otro signo o color político (si así fuera, todo resultaría más sen-
cillo). Por lo que ya no resulta fácil identicar un cariz más o menos progresista
o conservador según de quien provengan las propuestas en este ámbito nuestro.
PRESENTACIÓN
José León Alapont
Profesor Ayudante Dr. de Derecho Penal
Universitat de València

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