Presentación

AutorJosé Luís Fernández Maestu
Páginas15-22

Quién le iba a decir a Apolunios, Ministro de finanzas del rey Filadelfo, de la dinastía de los Ptolomeo de Egipto, que su contrariedad por haberse pagado de su caja siete talentos de plata sin su autorización, y su orden de que fuesen comprobadas las cuentas de Aristeo, uno de los tesoreros y las del mayordomo Artemidoro, y su posterior extensión a Zenón, administrador de todos sus intereses y jefe de contabilidad para que preparase sus cuentas para ser inspeccionadas por Pythen, marcaría los orígenes de la auditoría. En la Europa Feudal se llegaría a identificar las funciones con el cargo y así nació el auditor.

El nombre del "auditor" debe su origen a la forma en que se recibían (oyéndolas) las liquidaciones de las cuentas. El decantamiento de la institución va de la mano de los más importantes vaivenes económicos así, la revolución industrial inglesa y la crisis norteamericana del 29. Los escándalos, tanto internacionales (caso ENRON y caso PARMALAT), como nacionales (casos BANESTO, PSV y TORRAS), hacen suponer que la función del auditor se someterá a rígidos controles. No obstante, siempre quedará la cuestión de quién controla al controlador. Nunca debe olvidarse que el verdadero beneficiado por una buena auditoría es el accionista. Curiosamente, la retribución del auditor se recibe de los gestores de la sociedad, que muchas veces, estarán más interesados en que el informe les deje bien, que en otra cosa. ¿Será suficiente con los códigos de buen gobierno? Creemos que no. No es objeto de este trabajo el de precisar las normas técnicas de actuación de los auditores, pero sí han de avanzarse, al menos, las siguientes nociones:

* Según el ICAC el objetivo de la auditoría de cuentas anuales, es la emisión de un informe con el cual se de una opinión técnica sobre los estados financieros en todos sus aspectos significativos. La opinión técnica es la que se deduce de una planificación y ejecución de los trabajos de auditoría dirigida a formarse y soportar una opinión sobre todos

El Auditor y el Registrador Mercantil aquellos aspectos de las cuentas anuales que afectan significativamente a la imagen fiel que las mismas deben presentar. * Los usuarios del informe no deben interpretarlo como una garantía sobre la eficacia o eficiencia con que se han gestionado los asuntos de la entidad, ya que el balance no es más que el reflejo de la imagen fiel del patrimonio. Tampoco es un certificado de garantía de la exactitud de las cifras, ni de carencia...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR