Políticas del derecho social de tutela de los trabajadores de edad avanzada
| Autor | José Luis Monereo Pérez |
| Páginas | 9-35 |
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Capítulo I
POLÍTICAS DEL DERECHO SOCIAL DE TUTELA DE LOS
TRABAJADORES DE EDAD AVANZADA
1. INTRODUCCIÓN. RETOS ACTUALES EN MATERIA DE EMPLEO Y DEL
SISTEMA DE PENSIONES Y SU REPERCUSIÓN EN LOS TRABAJADORES
MADUROS
El punto de partida es bien conocido: Existe una gran preocupación
por la integración sociolaboral de las personas de edad avanzada en
una “sociedad del envejecimiento” (y no sólo “envejecida”). E im-
porta subrayar que este proceso de envejecimiento se acelerada y,
aparte de su rapidez, es muy generalizado en Europa y en general
en los países mínimamente desarrollados. Y esto es así porque las
personas de edad avanzada o mayores (por decirlo escuetamente)
es un hecho que se encuentran en nuestro sociedad (“sociedad del
trabajo”, todavía) en situación de riesgos, vulnerabilidad y margi-
nalidad, y esto no deriva de una causa natural, sino de prácticas
sociales, culturales y de una inadecuada política del Derecho Socio-
laboral que no ha garantizado efectivamente sus derechos funda-
mentales, y en particular sus derechos económicos, sociales y cul-
turales. Es de realzar ese papel cultural y jurídico e institucional en
la “creación” (no sólo es “dada”, sino también “construida”) de una
situación de minusvaloración y subalternidad social de las perso-
nas mayores en una sociedad dominada por la racionalidad instru-
mental y la desconsideración en todos los aspectos o dimensiones
de una sociedad orientada a garantizar efectiva y adecuadamente la
tan repetida –como incumplida– “solidaridad intergeneracional” en
todos los ámbitos. William Beveridge había introducido esa idea-
fuerza de proteger a las personas desde la cuna a la sepultura1.
1
Puede consultarse la exposición de síntesis de su pensamiento en MONEREO
PÉREZ, J.L.: “William Henry Beveridge (1879-1963): La construcción de los mo-
dernos sistemas de Seguridad Social”, en Revista de Derecho de la Seguridad Social
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JOSÉ LUIS MONEREO PÉREZ
Si el envejecimiento ha de considerarse una experiencia positiva,
una vida más larga acompañada por continuas oportunidades de
salud, de participación y seguridad. La Organización Mundial de la
Salud define el envejecimiento activo como «el proceso de optimi-
zación de oportunidades de salud, participación y seguridad con el
objetivo de mejorar la calidad de vida a medida que las personas en-
vejecen». Debe permitir el desarrollo de la persona a lo largo de todo
su ciclo de vida2. La tendencia hacia el envejecimiento es irreversible
y será especialmente visible antes de 2050. La transición demográ-
fica va a plantear en un desafío de magnitudes extraordinarias para
proteger a las personas mayores en el trabajo y en las protecciones
sociales dispensadas por los sistemas públicos de protección social.
Los mayores presentan un mayor riesgo de sufrir una pobreza re-
lativa si no se adoptan las medidas específicas adecuadas, tanto de
carácter preventivo como reparador. Estas personas mayores deben
mantener su derecho a un sistema público de pensiones suficientes
y adecuadas (desmercantilizadas) sin necesidad de comprarlas en
el mercado de la previsión privada. En este sentido se están produ-
ciendo fenómenos de privatización implícita (privatización de ám-
bitos funcionales del sistema público hacia el privado a través de la
técnica metafórica de los “vasos comunicantes”, que es contraria a
los modelos del garantismo multinivel de las pensiones) y explícita
(introduciendo factores paramétricos y no paramétricos en la direc-
ción de asistencializar el sistema público de pensiones y privatizar
los régimen profesionales de pensiones contributivas; cambiando
en algunos países el sistema financiero de reparto por otro de capi-
talización, etcétera)3. El Banco Mundial ha venido impulsando ese
modelo que hace prevalecer la provisión privada de las pensiones4,
Laborum, núm. 4 (2015), págs. 279 y sigs.; y del propio BEVERIDGE, W.: Seguro
social y servicios afines. Informe de Lord Beveridge, trad. Carmen López Alonso,
Madrid, Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, 1989.
2
Puede consultarse MONEREO PÉREZ, J.L.: “Ciclos vitales y Seguridad Social:
trabajo y protección social en una realidad cambiante”, en RMTAS, Número Ex-
traordinario (2008), págs. 49 y sigs.
3
Para los fundamentos y orígenes de estas estrategias de implantar una teoría de
los “vasos comunicantes” en el sistema global de pensiones, en sus doble vertiente
pública (Seguridad Social) y privada (mercantilizada), y demostrando que ese no
es el modelo deducible ex artículos 41 y 50 de la Constitución (en relación con el
art. 10.2 CE), véase, ampliamente, MONEREO PÉREZ, J.L.: Público y privado en
el sistema de pensiones, Madrid, Ed. Técnos, 1996, passim.
4
BANCO MUNDIAL: Averting the Old Age Crisis. Policies to Protect the Old and
Promote Growth, Washington DC, 1994.
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