Estudio sobre las actitudes de los consumidores y la relación de éstos con las cooperativas confederadas a hispacoop

Páginas99-120

    Equipo que ha realizado el estudio: Dirección, Ezequiel Baró y Mitfiel Flamanch, Coordinación, Francesc Falgueras; Equipo técnico, Óscar de Roselló, Teresa García y Oriol Ripoll.


Page 99

Introducción

Encontramos el ideal cooperativo en numerosos ejemplos a lo largo de la Historia. Sin embargo, es a madíados del siglo XVIII, en Gran Bretaña, cuando tenemos noticias de la formación de las primeras cooperativas -de producción- tal y como hoy las conocemos. Hacia 1820 el éxito de las ideas de Robert Owen, Mudíe o la «London Cooperative and Economic Society», dieron un nuevo impulso a estas iniciativas cooperativistas. En el Estado español, hay también, varios antecedentes; pero es en la segunda mitad del siglo XIX, cuando empiezan a cuajar las primeras organizaciones cooperativas, por ejemplo, la «Obrera Mataronense» (fundada en 1864 y dedicada a la producción de hilados y tejidos), «El Campesino» (fundada también en 1865, cooperativa de consumo), la «Económica de Palafrugell» (fundada también en 1865, cooperativa de consumo). Los primeros cooperativistas entenderían la organización cooperativa como un camino para alcanzar la cooperación total en la que integraban la vida comunitarista y el trabajo comunitario. Por tanto, es natural que el origen del cooperativismo contemporáneo esté estrechamente ligado con los movimientos que planteaban una forma diferente de organizar la sociedad. Así, a lo largo del siglo XIX y XX, el cooperativismo lo encontramos imbricando en los diferentes movimientos alternativos, bien ofreciendo una alternativa a la organización económica-empresarial establecida, bien ofreciendo una fórmula de resistencia a las clases más desprotegidas de la sociedad.

Actualmente, el movimiento cooperativista -que sigue siendo en gran medida una alternativa de organización económica al típico modelo empresarial- tiene planteados varios retos trascendentales. Tal como se dice en la presentación de HISPACOOP, «la evolución del mercado de la distribución comercial y los nuevos hábitos adquiridos por los consumidores» obligan a abordar iniciativas empresariales de nuevas dimensiones (geográficas, organizativas,...). HISPACOOP plantea abordar estas iniciativas desde una perspectiva cooperativista que queda claramente reflejada en el siguiente párrafo de su presentación: «el propio desarrollo de las cooperativas de consumidores implica la mejora del servicio para el usuario y es una consecuencia lógica que responde a la historia de este modelo cooperativo que está reconocido cronológicamente como primera forma de organización de los consumidores. Este factor histórico del cooperativismo justifica la importancia que tiene para HISPACOOP la promoción de campañas consumeristas, la defensa de los intereses de los consumidores y su participación en la organización cooperativa». El planteamiento del trabajo cuyos resultados presentamos seguidamente, se ha basado en dos ideas esenciales, que por otra parte, las cifras de la encuesta se han encargado de corroborar en gran medida. La primera es que en las cooperativas que, además de los asuntos relacionados estrictamente con el negocio, mantienen activo el clima cooperativista, los consumidores están considerablemente satisfechos. La segunda es que la fidelidad de los cooperativistas a sus coperativas, puede verse truncada por la intervención en el mercado de establecimientos que venden a precios más baratos. En suma, la mejora del equilibrio entre el fomento de la actividad y espíritu cooperativista y la mejora de las prestaciones (adecuada política de precios entre otras) puede garantizar la fidelización de los socios y la ampliación del mercado.

Nota metodológica de la encuesta

El objetivo principal del estudio, siguiendo las indicaciones de HISPACOOP, ha sido obtener una información pormenorizada y fiable sobre la relación que actualmente mantienen los consumidores -fundamentalmente, los socios cooperativistas, pero también los no socios- con las cooperativas y con sus establecimientos. Las dimensiones principales de esta relación que habían de ser consideradas en el estudio son:

* la fidelidad del consumidor respecto a las cooperativas;

* el grado de satisfacción del consumidor respecto a los servicios que las cooperativas les ofrecen;

Page 100

* el grado de conocimiento de los socios cooperativistas de las actividades de las cooperativas y su grado de participación en ellas;

* el grado de identificación de los socios con los princi pios que informan las cooperativas. En este estudio, el trabajo de campo (de encuestación a los consumidores socios y no socios) tenía, por tanto, una importancia capital, ya que las principales conclusiones debían extraerse de la información obtenida por esta vía De ahí, la importancia del diseño de la muestra a encuestar.

Nuevamente a sugerencia de los técnicos de HISPACO-OP, la muestra tenía que diseñarse teniendo en cuenta que debían obtenerse resultados (con significación estadística) diferenciados según la actividad principal que desarrollan las distintas cooperativas (Alimentación, Libros y otros productos culturales, Asistencia Hospitalaria y Distribución de Energía Eléctrica) y, además, con respecto a las cooperativas de consumo de alimentación, logrando, asimismo, una adecuada representatividad de cada una de las cinco federaciones (Andalucía, Cataluña, Euskadi, UNCCUE -que se toma como una federación más- y Valencia) Además, debían tenerse en cuenta criterios de representación en la muestra de aquellos establecimientos que están ubicados en medio urbano y de aquellos que lo están en medio rural. Al respecto, los técnicos de HISPACOOP, seleccionaron las cooperativas de cada federación y los establecimientos de cada cooperativa que mejor se ajustaban al diseño escogido de la muestra de consumidores (socios y no socios) a encuestar. Así, el tamaño de la muestra ha sido, en total, de 3.085 unidades, distribuidas entre 28 establecimientos de 14 cooperativas de las 5 federaciones consideradas La unidad muestral, en todos los casos, ha sido el consumidor (socio y no socio) mayor de 18 años.

La distribución de esta muestra, siguiendo los criterios anteriormente expuestos, es la que se indica en el cuadro siguiente:

[ VEA LA TABLA EN EL PDF ADJUNTO ]

Como puede observarse.

* Las encuestas realizadas a los socios cooperativistas han representado el 82,9% del total, mientras que las efectuadas a consumidores no socios han sido el 17,1%

* El 60,9% de las encuestas realizadas a los socios y el 83,9% de las efectuadas a no socios corresponden a co operativistas de alimentación El peso específico de es ta actividad dentro de la muestra responde a la impor tancia relativa de la misma dentro de HISPACOOP

* Se ha buscado, también, un equilibrio en la ubicación geográfica de los establecimientos, resultando al final un 57,1% de encuestas en establecimientos ubicados en zonas urbanas y un 42,9% de encuestas en esta blecimientos ubicados en zonas rurales. Este equili brio ha sido difícil de obtener ya que, excepto en el caso de las cooperativas de alimentación, el resto de las actividades cooperativas se dan, únicamente, en zo nas urbanas

* Finalmente, no se han realizado encuestas a consu midores no socios en las cooperativas de asistencia hospitalaria y de distribución de energía eléctrica ya que, por sus características, las mismas no ofrecen servicios a no asociados.

Page 101

La distribución de la muestra por federaciones ha sido la siguiente:

[ VEA LA TABLA EN EL PDF ADJUNTO ]

Para la realización del trabajo de campo se han diseñado seis tipos de cuestionarios distintos (se adjunta reproducción de los mismos en el anexo):

* Alimentación (socios)

* Alimentación (no...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR