¿MATÓ A SU MADRE EL HIJO DEL NOTARIO?

Todo es una canallada de la Policía». La voz de Manuel Lousa truena al otro lado del teléfono. A sus 90 años, se niega a creer que su nieto Ramón matara a su madre, como sostienen los investigadores. No hay prueba de ADN que le convenza de lo contrario. «Cuando llegue el juicio, todo se aclarará...», insiste. «No hay ninguna razón jurídica para detenerlo. La Policía dice que mi nieto mató a mi hija... ¡Menuda canallada!».-¿Cómo está Ramón?-Supongo que muy entero, porque es inocente...

No sólo el coruñés Manuel defiende a su nieto, el eterno opositor a notario, como su padre. La familia en bloque respalda a Ramón Sánchez Lousa, de 32 años, desde que la Policía lo arrestó a primera hora del lunes. Lo acusan de matar a su madre, María Ángeles Lousa Gayoso, de 62, en un chalé de Puerta de Hierro (Madrid), el 1 de julio, después de la final de la Eurocopa. La detención dio un volantazo al caso. La primera hipótesis que manejaron los investigadores, con Ramón como principal testigo, fue que unos encapuchados mataron a la mujer cuando les sorprendió desvalijando la casa familiar. Pero, por mucho que indagaron los agentes, no hallaron pruebas que respaldaran esta tesis. Y, mientras realizaban estas pesquisas, un resto capilar hallado en las uñas de la víctima, que contenía el ADN del hijo, apuntó, a los ojos de los investigadores, en la dirección contraria: el parricidio. Caso cerrado, opina la Policía. Una locura, replica la familia, que sigue proclamando su inocencia. ¿Quién tiene razón?En el momento de la detención, el joven Ramón se quedó paralizado. No mostró resistencia. Tampoco sorpresa. Todo lo contrario que el padre, que asistió anonadado a la surrealista escena. El hombre sufrió su segundo mazazo en cinco meses: primero, la muerte su esposa; ahora, la acusación contra su único hijo. «Esto es una locura, no hay pruebas contra él, tenemos que luchar por mi hijo», ordenó a sus abogados en cuanto recuperó el aliento.

Dicho y hecho. Ramón apenas pasó 24 horas en el cuartelillo. Testificó el martes a las 13:15 y, media hora después, el padre ya había depositado la fianza: 25.000 euros en una sucursal del Banesto. De allí, padre e hijo volvieron juntos a casa: a la mansión de Puerta de Hierro, un barrio de lujo a las afueras de la capital, donde arrancó la tragedia minutos después de que Iker Casillas alzara el trofeo de campeones.

El círculo del acusado ha erigido un muro de silencio a su alrededor. Salvo el indignado Manuel, todos se niegan a...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR