Los MASC como instrumentos de paz

AutorFrancisco Javier Gorjón Gómez - Rafael Sánchez Vázquez
Cargo del AutorUniversidad Autónoma de Nuevo León - Benemérita Universidad Autónoma de Puebla.
Páginas29-40

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1. Introducción

La evolución constante de los sistemas judiciales en el mundo es evidente, obligando a los países a incorporar figuras jurídicas novedosas en sus esquemas de impartición de justicia, como es el caso de los juicios orales, los métodos alternos de solución de controversias y la justicia restaurativa, dando paso a elementos aun más novedosos como es la "PAZ"; si antes el fin último de las leyes era la paz social, ahora es considerada no solo un fin sino un elemento sine qua non de todo sistema judicial que quiera considerarse moderno.

La paz es esencial para la evolución y desarrollo del hombre, no podemos visualizar un movimiento de paz sin la participación activa de la sociedad, no podemos considerar una acción de paz que no busque la justicia y la equidad, no podemos considerar una propuesta de paz que no prevea salvaguardar los interés de las partes en conflicto, no podemos considerar a un programa pacifista como tal si su esencia no está basada en los sentidos humanos, que significa esto último: Sensibilidad, pasión,

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percepción, conciencia, paciencia, bondad3. El límite de la paz, es la paz misma de nuestro prójimo, y así lo establece la máxima "entre los individuos como entre las naciones el respeto al derecho ajeno es la paz"4.

Estos componentes se encuentran presentes en los métodos alternos de solución de controversias (MASC), son parte esencial de ellos y de la justicia restaurativa, identificando a la voluntad como el hilo conductor de la instrumentación de estos métodos; el uso de sus técnicas le permiten a la sociedad participar directamente en la solución de sus controversias, evitando con ello la escalada social de los conflictos, inhibiendo acciones violentas y previendo consecuencias costosas para las partes en lo particular o en lo colectivo. Identificándose entonces en los métodos alternos un triple propósito, la solución, la prevención y la ciudadanización de la justicia. La trascendencia de todo esto, es que no es algo nuevo, estamos redescubriendo las bondades de la negociación, de la mediación y del arbitraje, en realidad son una panacea vs el conflicto de la impetración de la justicia.

2. Marco de Referencia

La sociedad evoluciona en torno a un escenario internacional, ampliamente influenciada por diversas corrientes de pensamiento en un ámbito multicultural. Surgiendo con ello una pluralidad de formas de vida en razón de necesidades particulares, que afectan el modus vivendi de núcleos poblacionales de la misma localidad, región o nación; traduciéndose en desacuerdos, en conflictos sociales por la diversidad de intereses que confluyen en un mismo espacio.

Acentuándose por la carencia de programas que generen una cultura de PAZ, una cultura de participación ciudadana en la solución de conflictos y por las limitaciones en los esquemas de impartición de justicia, debido a que los programas gubernamentales no responden a las necesidades reales de una sociedad conflictuada y moderna, potenciándose por el conflicto de la impetración de la justicia5, entendiendo que el sistema judicial es el garante de la resolución de los conflictos en la sociedad, sin embargo, su falta de cobertura y las excesivas cargas de trabajo a las cuales se encuentra sometido no le permiten cumplir con plenitud los postulados en los que se sustenta6, afectando a la sociedad y los individuos como receptores últimos del sistema; parafraseando a Neuman, los individuos ".... pasan a ser uno más para el

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recuento y esa codificación hace perder la posibilidad de goce de derechos humanos que le son inherentes como persona y por su virtualidad de ser..."7.

Ante este panorama, la sociedad requiere de opciones, de formulas de entendimiento para vivir en armonía, que generen el respeto a la vida, la disminución de conductas violentas y antisociales, y la promoción y la práctica de la no violencia por medio de la educación, el diálogo y la cooperación. La sociedad debe de tomar conciencia que existen otros métodos distintos a la vía judicial para resolver sus conflictos, lo que requiere desde luego un profundo cambio de conciencia social8. Es precisamente en este cambio de conciencia donde situamos a la paz y a los MASC considerando que su implementación y puesta en marcha son un cambio disruptivo en la impartición de justicia y en la construcción de una cultura que se basa en creencias, valores y prácticas9 traducida en las mejores prácticas en pro de una nueva realidad social "una nueva cultura".

Para lograrlo deberán generarse políticas públicas de alto impacto que favorezcan la evolución de los sistemas de bienestar social, de procuración e impartición de justicia en todo el orbe10, siendo un requisito sine qua non de los gobiernos apoyar este cambio, considerando siempre las necesidades de la sociedad en vía de una mejor calidad de vida11, en el que se incluye la paz social, como es el caso de México con su reciente reforma constitucional penal en la que incorporó en su artículo 17 la implementación de métodos alternos como mecanismo para la reparación del daño a través del perdón que busca recomponer el orden social quebrantado por medio de la restitución y no de la pena de cárcel12.

Es necesario reorientar la justicia retributiva que predomina a nivel mundial al uso de los MASC, el crecimiento exponencial de los conflictos sociales provoca que sea inoperante, requiere del apoyo de la ciudadanía ya que es esta su principal receptora. La justicia alternativa es en esencia la válvula de escape de este problema, teniendo como principal elemento la ciudadanización de la justicia, tutelada por las mismas leyes, ya que el límite de estos métodos es el orden público, privando para el sistema judicial materias especificas, sin embargo, la necesaria tutela a instituciones jurídicas explicitas no reducen el margen de acción de los MASC, visualicemos solo como

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ejemplo la mediación penal13 o la mediación familiar14, áreas de gran influencia y alcance social en donde se ha demostrado con gran éxito su valía.

El uso de estos métodos a generando al unisonó la plataforma para la promoción y desarrollo de la justicia restaurativa que se encuentra aun en ciernes, pretende la reparación del daño de víctima y victimario, su reinserción social, pero principalmente la paz en un estadio universal enmarcado en normativas internacionales de las Naciones Unidas y la Unión Europea15; propiciando la participación colaboradora de la comunidad como sus principal eje rector16, coincidente con los ejes rectores de la paz17.

La negociación, la mediación y el arbitraje sustentados en los principios de entendimiento y cooperación mutua logran el arreglo pacífico de los conflictos, manteniendo unidas las relaciones interpersonales en todos los niveles de la sociedad en un ambiente de paz y no violencia. Los MASC son una forma diferente de entender las relaciones humanas, tiene los elementos suficientes para poder ser catalizadores que transformen el conocimiento y las costumbres de nuestras sociedades18, ampliamente ligados a la cultura de la paz, ya que ambas formulas expresan sentimientos de cohesión de todos los individuos19.

3. Ámbito de Desarrollo

Los MASC como herramientas de paz son un medio para el desarrollo pleno de una cultura de la no violencia y la solución de conflictos, esto derivado del constante devenir en que nos encontramos inmersos en lo individual y en lo colectivo. Al respecto Fisas señala "Que el proyecto de construir una cultura de paz en buena medida no es otra cosa que el reto planetario de abordar los conflictos desde otra mirada, con otros utensilios y con otros propósitos...", asegura que "...la alternativa a la violencia ha de sustentarse en la negociación, el dialogo, la mediación, el empoderamiento, la empatía y la capacidad de manejar nuestros propios conflictos..."20, considerando en todo momento las características mensurables de la

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sociedad, para generar estrategias de desarrollo más asertiva de la cuales partir para la implementación de los MASC.

La cultura la podemos entender como aquello que han ido construyendo los seres humanos a lo largo de su historia, "es todo lo que se aprende y se transmite socialmente"21 y su principal característica es que esta se aprende a través de procesos de socialización, a través de la relación de cada individuo con el medio social y natural en el que se desenvuelve y da sentido y significado a la realidad22.

Esta definición de cultura nos permite prever de lege ferenda que la universalidad de los principios en que se sustentan los MASC y el reconocimiento de la necesidad de paz en el mundo, darán paso a su instrumentación e implementación como una realidad latente e inexorable.

Los MASC tienen su fundamento en el principio de autonomía de la voluntad de las partes reconocido internacionalmente, es un derecho universal presente en la mayoría de la sociedades y un sustento legal reconocido a nivel mundial que les otorga una seguridad jurídica a sus resultados (acuerdos, convenios, laudos) los hace vinculantes a las partes, en un esquema multidisciplinario, interdisciplinario y multidimensional. Es por ello que son los principales aliados de la paz considerando que su desarrollo necesita de un marco legal porque la oposición a la violencia requiere de una adecuada comprensión de los límites en los que puede moverse lícitamente las distintas actividades humanas23.

Existen básicamente dos conceptos de paz, el de la paz positiva y la paz negativa, el primero se caracteriza por la ausencia de guerra y violencia directa, junto con la presencia de la justicia social y el segundo por la simple ausencia de guerra y violencia directa24. Ambos conceptos son compatibles con la misión de los MASC que...

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