La ironía de la 'españa plural' de José Cadalso

AutorModesto Barcia Lago
Cargo del AutorAbogado
Páginas19-30
I
LA IRONÍA DE LA “ESPAÑA PLURAL” DE JOSÉ
CADALSO
En sus Cartas Marruecas, nuestro ilustrado Don José CADALSO utiliza,
con peculiar ironía, la f‌i cción de un heterónimo suyo, el apócrifo personaje
Gazel Ben-Aly, para la disección crítica del “carácter nacional, cual lo es en el
día, y cual lo ha sido”4. El alter ego cadalsiano toma la f‌i gura de un musulmán
marroquí desengañado ya de las ilusiones de la edad moza, que desde su tierra
norteafricana vino a la Península en el cortejo de una embajada, y supuesta-
mente, se habría quedado a vivir entre los cristianos de España como uno más,
“poseyendo su idioma, y en amistad con un natural, hombre que ha pasado
por muchas vicisitudes de la suerte, carreras y métodos de la vida”5. El f‌i cticio
personaje daba cuenta cumplida en sus cartas a su maestro musulmán –también
apócrifo, naturalmente– Ben-Beley, de las impresiones de su estancia en tierras
inf‌i eles, haciéndole notar que, pese a la aparente uniformidad exterior de los
europeos en lujos, mesa, teatros y otros hábitos, en lo tocante a leyes, vicios y
virtudes, las costumbres de cada nación eran sumamente diversos; pero, para su
perplejidad, tal diversidad era todavía más acusada entre las gentes de España:
Aún dentro de la española, hay variedad increíble en el carácter de
sus provincias. Un andaluz en nada se parece a un vizcaíno; un ca-
talán es totalmente distinto de un gallego; y lo mismo sucede entre
un valenciano y un montañés. Esta península, dividida tantos siglos
4 CADALSO, José: Cartas marruecas, Editorial Castalia, Madrid, 1985, “Introducción”,
pág. 47.
5 Ibídem, I; pág. 49.

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