Introducción

AutorMiguel Basterra Hernández
Páginas11-18
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Capítulo I
INTRODUCCIÓN
Como se sabe, el contrato de trabajo a tiempo parcial ostenta actual-
mente una importancia estratégica crucial en los modelos de relacio-
nes laborales de los países occidentales. Y es que, en efecto, la posi-
bilidad de trabajar durante un número de horas diarias, semanales
o anuales inferior a la jornada de trabajo “completa” o máxima que
podría llegar a desarrollarse se erige como un instrumento ideal para
responder a muchos de los retos que se ciernen sobre el mercado de
trabajo. Todo ello por diversos motivos.
En primer lugar, el trabajo a tiempo parcial tiene un efecto directo in-
discutible en el incremento de las tasas de empleo a través del reparto
de este “bien”, tan escaso hoy en día, entre la población trabajadora.
Desde luego, no cabe duda de que, ante la extraordinariamente se-
vera situación que atraviesa en este terreno la Unión Europea en su
conjunto, y muy especialmente nuestro país, es éste un factor muy a
tener en cuenta. Es cierto que el ideal al que aspirar y el objetivo al que
dirigir la política social y económica debe ser el de alcanzar el pleno
empleo de calidad (lo que implicaría que todo trabajador tuviese la
posibilidad de desarrollar su actividad laboral a tiempo completo, si
esa fuese su aspiración1). Sin embargo, parece innegable que, ante las
manifiestas adversidades de corte global, resulta necesario, al menos,
explorar las ventajas que pudiera plantear en este sentido el fomen-
to del trabajo a tiempo parcial. En esta misma línea, además, debe
1
El art. 40.1 de la CE establece, entre los principios rectores de la política social y eco-
nómica, que “los poderes públicos promoverán las condiciones favorables para el progreso
social y económico y para una distribución de la renta regional y personal más equitativa,
en el marco de una política de estabilidad económica. De manera especial realizarán una
política orientada al pleno empleo.” Sobre las distintas definiciones del concepto de “ple-
no empleo” dentro de las diversas líneas de pensamiento, véase: CARDONA RUBERT,
M. B., CABEZA PEREIRO, J., TERRACILLOS ORMAETXEA, E.: “Políticas de empleo”,
en A.A.V.V. Políticas Sociolaborales, Cizur Menor (Civitas), 2014, págs. 252-256.

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