Inserción sociolaboral del superviviente de cáncer infantil: Otro desafío pendiente

AutorSara Crespo Romero y Antonia Martínez Agüero
Páginas429-431

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Cada año se diagnostican en España cerca de 1.400 nuevos casos de cáncer infantil (0-18 años) y gracias a los avances en la investigación, en las técnicas diagnósticas y en los tratamientos, la tasa de supervivencia de cáncer infantojuvenil ha aumentado hasta casi el 80%. En esta población que está en aumento, con frecuencia aparecen secuelas y alteraciones derivadas de los tratamientos, que pueden suponer un obstáculo de cara a la adaptación a una vida normalizada después del cáncer.

Con el objetivo de identificar, tanto las necesidades de los jóvenes supervivientes de cáncer infantil, como el impacto que supone esta enfermedad en el futuro, ASION desarrolló gracias a la Dirección General de Atención a Personas con Discapacidad (Consejería de Políticas Sociales y Familia) el Observatorio de Integración Sociolaboral para jóvenes con cáncer superado.

El objetivo de este estudio era conocer el estado de: salud, social y de formación/empleo de los jóvenes que habían superado un cáncer, de cara al diseño, la ejecución y la mejora de programas de inserción social y laboral de los supervivientes.

Las principales conclusiones del estudio fueron:

El 80,4 % de los participantes refirió algún tipo de secuela (física, psicológica o sensorial).

El 21,8% manifestó haber tenido problemas para seguir estudiando, bien por falta de concentración después de los tratamientos o por pérdida de motivación.

El 36% de los encuestados tenían reconocido un grado de discapacidad y dentro de este porcentaje el 31% tenía reconocido un grado mayoral 65%.

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La mayoría de los supervivientes habían conseguido normalizar su vida, enfrentándose a los mismos retos y dificultades que la población general de su edad y demostrando además mayor madurez.

El 11% de los participantes se habían sentido discriminados y perjudicados por la enfermedad en el trabajo.

El 9% consideraba que la enfermedad era un obstáculo para promo-cionar profesionalmente.

Más del 60% de los encuestados mostraron interés en un servicio de orientación sobre formación y empleo.

Teniendo en cuenta lo anterior, podemos afirmar que las secuelas derivadas de los tratamientos oncológicos pueden suponer una barrera para la inserción social y laboral del superviviente, por ello ASION pone en marcha en 2017 el programa de orientación formativa y laboral para estos jóvenes, con el fin de:

Mejorar la empleabilidad de los jóvenes supervivientes.

Conocer el impacto que supone la enfermedad de cara al...

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