GERGEN, Thomas: Pratique juridique de la paix et trêve de Dieu à partir du concile de Charroux (989-1250)
| Autor | Belén Malavé Osuna |
| Páginas | 780-782 |
GERGEN, Thomas: Pratique juridique de la paix et trve de Dieu partir du concile de Charroux (989-1250), Frankfurt am Main, 2004, 264 pp.
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Esta curiosa monografía nos presenta la paz de Charroux, esto es, el primer concilio de la paz de Dios en Francia, desde una novedosa perspectiva e incluso, formalmente, así se evidencia. En efecto, el libro se estructura en dos partes, de las cuales la primera se hace preceder por una introducción, pero en realidad, podría afirmarse que los tres capítulos de la parte primera no tienen una misión per se, sino que más bien resultan ser el vehículo que presenta y conduce al lector a la segunda parte, constituida por la hipótesis de trabajo anunciada ya desde el principio. No obstante su carácter preparatorio, la aludida primera parte resuelve cuestiones vitales que no han de olvidarse si queremos entender en su justa medida la segunda. A lo largo del libro, el autor pretende demostrar la aplicación práctica de aquellos cuatro cánones de Charroux durante una amplia franja temporal que parte del año 989 y llega hasta el 1250. Precisamente, su carácter ejemplar queda avalado por el hecho de que numerosos concilios posteriores celebrados tanto en Francia como en Alemania, España, Italia y también Inglaterra hayan adoptado sus prescripciones, asumiendo el espíritu que en ellas gravita. Por otro lado, buena parte del éxito y difusión del Concilio se debe, según el autor, al deseo de armonización del Derecho, muestra de lo cual resulta el hecho de que posteriores impulsores de concilios de paz hayan asumido estas reglas de Charroux. Para mostrar esa original óptica desde la cual se aborda el estudio, Gergen relaciona y describe sumariamente las líneas de estudio seguidas hasta el momento, aunque ninguna de ellas resulta plenamente satisfactoria en aislado, como tampoco ninguna de ellas indaga en las referencias explícitas o contextuales a los conocidos cánones; algo que sí hace el autor en la segunda parte del libro, cubriendo de esta forma un vacío doctrinal llamativo.
En el Capítulo I, a partir de la p. 37, se exponen las razones por las cuales la paz de Charroux se ha tomado como modelo. Por ejemplo, el autor concede una importancia fundamental a la presencia de ciertas reliquias, como la Vera Cruz, en Charroux, aunque otra serie de razones hacían de la Abadía un lugar ideal para proclamar los cánones de la paz de Dios, entre ellas, sus características espaciales: amplitud y ubicación aislada pero...
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