«El compliance que viene» ISO 37301 - sistemas de gestión del compliance
| Autor | Iván Martínez López |
| Cargo del Autor | Vicepresidente Internacional World Compliance Association CEO INTEDYA Internacional |
| Páginas | 159-186 |
159
SUMARIO: I. ¿Cuál es el objetivo, fundamento y campo de aplicación de
ISO 37301:2021?. II. Iniciando por el diagnóstico y análisis del contexto
de la organización. III. Cumplimiento, liderazgo y definición de responsa-
bilidades. IV. Planificando el programa de cumplimiento. V. Apoyo y so-
porte al programa de cumplimiento. VI. Operación y control operacional.
VII. Evaluando del desempeño y la eficacia del programa de cumplimien-
to. VIII. Mejora continua del sistema de gestión del cumplimiento. IX. ISO
37301:2021 a vista de pájaro.
CAPÍTULO 7
«EL COMPLIANCE QUE VIENE» ISO 37301 –
SISTEMAS DE GESTIÓN DEL COMPLIANCE
Iván Martínez López
Vicepresidente Internacional World Compliance Association
CEO INTEDYA Internacional
Hablar del futuro y hacer predicciones nunca es sencillo, y menos aún
hacerlo en un libro que carece del carácter efímero que caracteriza a la mayoría
de los medios de comunicación y difusión en la actualidad. Pese a ello, tengo
pocas dudas de que la «predicción» que voy a realizar está lo sucientemente
sustentada en antecedentes y tendencias que, de ocurrir otra cosa diferente en el
futuro, solo se me ocurre que pudiera estar motivada por un «cataclismo» global.
Vamos a hablar de un futuro que ya es presente, ya que, desde el pasado
13 de abril de 2021, está aprobada y publicada la versión denitiva de la que, al
menos en mi opinión y sin duda alguna, será la norma internacional de referen-
TIONES PENALES A DEBATE
PERE SIMÓN CASTELLANO | ALFREDO ABADÍAS SELMA | COORDINADORES
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cia que jará los parámetros estructurales que debe contener cualquier programa
o sistema de cumplimiento para cualquier tipo de organización en el mundo,
privada, pública, multinacional o pyme. Pero antes de entrar en la profundidad
de la relevancia y contenido de esta norma, conviene poner un poco de contexto
y antecedentes de lo que viene ocurriendo en el panorama del cumplimiento.
Sin duda, el compliance en la última década está siendo un fenómeno
creciente en las organizaciones y en los medios de comunicación, motivado en
muchas ocasiones por cambios legislativos como el que abordó España con la
consabida reforma del Código Penal del año 2010, que introdujo la responsa-
bilidad penal de las persones jurídicas y, otras muchas veces, por la presión de
los ciudadanos, los medios de comunicación y de la sociedad en general hacia
las entidades públicas y privadas, requiriéndoles explicaciones de cómo obtie-
nen los resultados, y exigiéndoles, ya no solo un pleno cumplimiento de las
«reglas de juego», si no una clara orientación hacia la realización de esfuerzos
adicionales en la dirección de la transparencia, la ética y la conducta ejemplar.
Este fenómeno de masas en el que se ha convertido el compliance, tam-
bién ha traído una alta dosis de confusión y de exceso de etiquetas que ha
provocado que, ante el desconocimiento y el desconcierto generalizado de
profesionales y empresas –incluso me atrevo a decir que del propio descono-
cimiento de las más altas instancias legislativas y judiciales– , hayamos caído
en el error de llamar «programa de cumplimiento» a cualquier elemento des-
lavazado que, por sí solo, está muy lejos de ser un programa de cumplimiento
completo. Tan solo hay que darse un paseo por internet o asistir a algunas con-
ferencias y ver cómo, lastimosamente, hay muchas organizaciones que consi-
deran que un código ético o una política de cumplimiento ya es un programa
de cumplimiento completo o, por citar algunos ejemplos más, las tan conoci-
das matrices de riesgos con múltiples colores tan vistosas y en muchas ocasio-
nes tan mal diseñadas técnicamente, por no olvidarnos de vistosos canales de
denuncia en páginas web, sin los adecuados procedimientos que los sustenten.
Todos los elementos citados, cuando están diseñados adecuadamente,
son esfuerzos muy loables en el camino correcto, pero no son más que piezas
de un puzzle mucho mayor que requiere de una estructura y de un diseño a
medida de cada organización, y que debe contener una serie de elementos mí-
nimos. Tan solo tenemos que tomar como referencia el mundo anglosajón, sin
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