Décima-primera estación. Tesis que buscan al concepto unitario del dolo. (La supremacía del dolo eventual)
| Autor | Antonio Sólon Rudá |
| Cargo del Autor | Doctorando en Ciencias Criminales por la Facultad de Derecho de la Universidad de Coimbra, en Portugal |
| Páginas | 345-406 |
DÉCIMA-PRIMERA ESTACIÓN
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TESIS QUE BUSCAN AL CONCEPTO
UNITARIO DEL DOLO.
(La supremacía del dolo eventual)
1. Consideraciones preliminares
En este parágrafo, compuesto por siete apartados, trataremos de seis que
buscan demostrar un concepto unitario de dolo, pero buscando, además, deter-
minar la supremacía del dolo eventual frente a las demás teorías. En el primer
apartado trataremos de la tesis de Platzgummer, que desarrolló la teoría de la
co-consciencia. En los dos apartados siguientes trataremos de la tesis de Schroth
y de la de Kindhäuser. En el cuarto apartado trataremos de la tesis de Díaz Pita,
que deende la decisión contraria al bien jurídico como factor determinante para
el dolo. En el quinto apartado trataremos de la tesis de Pérez Barberá, donde
deende un metaconcepto de dolo. Al nal, en el último apartado tratamos de la
tesis de Porciúncula, que aborda la idea anti-cartesiana del objetivo en lo subjeti-
vo, no es una tesis propiamente sobre el dolo, como veremos.
2. La tesis de Platzgummer.
La teoría de la co-consciencia
Platzgummer intenta contribuir para solucionar el problema de la impu-
tación por medio de su teoría de la co-consciencia, donde parte de la insatis-
facción de considerar insuciente la armación de ocurrencia de dolo solo con
el conocimiento potencial de elementos del tipo por parte del sujeto1127. Por
1127 Véase en Platzgummer (1964), 59.
DOLO E IMPRUDENCIA UN VIAJE CRÍTICO POR LA HISTORIA DE LA IMPUTACIÓN Antonio Sólon Rudá346
esta concepción los elementos del tipo pueden ser divididos en dos grupos, al
que nuestro autor va a decir que el primero es formado por elementos que di-
cen respecto al signicado de determinados objetos que son percibidos por los
sentidos, es decir, reriéndose a particularidades o signicantes de tales objetos.
Sobre este grupo, Platzgummer va a sostener que el sujeto es dotado de
una capacidad de percepción automática, es decir, percibe de modo automático el
signicado y el sentido del objeto, no siendo necesario que dicha percepción sea
expresa, pues el sujeto es advertido inmediatamente del objeto y su signicado
social y material. A lo sumo, el primer grupo de elementos puede ser resumido
como aquellos percibidos de forma global, siendo así «abarcados en toda la ex-
tensión y signicado», aprendidos inmediatamente de forma, incluso, no expresa.
Para ejemplicar ese primer grupo, Platzgummer nos trae el supuesto
de un padre que es golpeado por su propio hijo, en un momento de total pér-
dida de dominio sobre sí mismo, donde se percibe que la percepción del hijo
sobre la condición de su padre le surge como una «síntesis psíquica»1128. Esto
signica decir que no hay, por ejemplo, necesidad de que el hijo diga: «acabo
de golpear a mi padre». Ya el segundo grupo es formado por las características
u obligaciones del sujeto.
Ahora bien, nosotros seres humanos somos naturalmente poseedores de
características que con el pasar del tiempo se tornan casi obligaciones inheren-
tes a nuestros comportamientos, siendo incluso reconocidos como duraderos.
De este punto, parte nuestro autor para armar que tales características forman
parte del conocimiento del sujeto, constituyéndose en su co-consciencia (co-
conocimiento)1129.
Signica decir, por tanto, que el conocimiento actual de que se ha habla-
do es percibido, no de forma expresa, sino que implícitamente1130. Es impor-
1128 Platzgummer (1964), 59.
1129 Platzgummer (1964), 60. Este autor se va a referir a este co-conocimiento utilizán-
dose del término en alemán «dauerndesBegleitswissen». Según Díaz Pita, «lo co-
consciente es, pues, aquel contenido de la consciencia al que no se atiende de modo
explícito, sino de forma implícita y que se observa de modo necesario y automático».
Véase en Díaz Pita (1994), 60.
1130 Platzgummer (1964), 60.
DÉCIMA-PRIMERA ESTACIÓN | TESIS QUE BUSCAN AL CONCEPTO UNITARIO DEL DOLO.
(LA SUPREMACÍA DEL DOLO EVENTUAL) 347
tante decir que los elementos del tipo son percibidos cuando de la ejecución
de la acción, y siendo tales elementos conocidos (implícitamente) por el sujeto,
deben ser incluidos en su dolo. Para ejemplicar el segundo grupo, nuestro
autor trae el supuesto del funcionario que practica el delito de malversación.
Así, «es muy posible que el funcionario que malversa no piense, al rea-
lizar el delito, en esa cualidad personal suya, pero no por ello podrá alegar
que ha actuado sin dolo respeto de su cualidad funcionarial»1131. Esto ocurre
porque, según Platzgummer, la cualidad de funcionario ya está implícita en el
conocimiento del sujeto, tanto que «cuando alguien pregunta por esa cualidad,
el sujeto no necesita, para contestar, ningún esfuerzo de la memoria, sino que la
respuesta está siempre inmediatamente disponible en base a la vivencia inme-
diata y actual, sin necesidad de reexionar y sin los característicos fenómenos
que se presentan cuando uno se acuerda de algo»1132.
En efecto, la tesis de Platzgummer puede ser resumida en la cuestión de
imputación dolosa por medio del conocimiento actual del sujeto, que puede ser
percibido de forma explícita o implícita. Así, en el ejemplo del primer grupo
es posible decir que el hijo, de forma implícita y automática, esto es, de forma
expresa, poseía el conocimiento de la realización parental y, en esta condición,
también imputan el dolo a la conducta del sujeto funcionario, pues la percep-
ción de su condición es vericada de forma implícita, es decir, está incluido en
su pensamiento material.
2.1. Visión Crítica
Lo que pretendió Platzgummer fue, a ejemplo de tantos otros autores,
ofrecer un concepto unitario de dolo en base, equivocadamente, a caracteres
únicamente cognitivos. Su tesis, en denitiva, trata de uno de los mayores
ejemplos de que la doctrina nunca ha sabido resolver el problema de la impu-
tación. En ese contexto, pocas tesis fueron tan equivocadas al tratar del tema,
pues basarse en criterios puramente objetivistas e inconsistentes del punto de
vista dogmático, como ha hecho nuestro autor con su teoría de la co-conscien-
1131 Platzgummer (1964), 60.
1132 Platzgummer (1964), 60.
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