Costa Rica: Estructuras y esquemas de los sistemas de información jurídica.

AutorChristian Hess Araya
Cargoes Licenciado en Derecho y Máster en Ciencias de la Computación e Informática, ambos grados de la Universidad de Costa Rica. Letrado de la Sala Constitucional de la Corte Suprema de Justicia y profesor de Derecho Informático en la Universidad de La Salle, en San José. Miembro fundador y Secretario de la Asociación Costarricense de Derecho e Informá

RESUMEN:

En cualquier sistema de información, se distingue el esquema de la estructura organizacional. Este trabajo, partiendo de conceptos generales descritos separadamente por L. Rosenfeld y P. Morville, busca aplicarlos específicamente a los sistemas de información jurídica, en procura de obtener un diseño más eficiente y de máximo provecho para el operador.


1. Introducción

Este artículo pretende examinar someramente distintas alternativas para la organización de un sistema de información jurídica, desde el punto de vista de diseño, sobre la base de conceptos más generales propuestos por L. ROSENFELD y P. MORVILLE. [1]

Para nuestros efectos, es indiferente cuál sea el contenido preciso de dicho sistema (es decir, que se trate de normativa, jurisprudencia, doctrina, etc.).

La tesitura central es la de que la forma debe seguir a la función. Dicho de otro modo, la elección de una u otra alternativa de diseño depende eminentemente de cuál sea el propósito del sistema de información, así como del contexto en que vaya a ser empleado, reconociendo en todo momento las diferencias cognoscitivas entre los usuarios.


2. Elementos de un sistema de información jurídica

En general, en cualquier sistema de información (y los jurídicos, desde luego, no son distintos en este sentido), es posible distinguir el esquema de la estructura organizacional.

  • El esquema organizacional define las características comunes de los elementos de contenido e influencia su agrupamiento lógico. Aquí, el diseñador debe identificar las entidades y las categorías básicas en torno a las cuales se va a construir el sistema y a organizar la información. En general, el esquema elegido puede ser exacto o ambiguo.
  • La estructura organizacional, por su parte, define los tipos de relaciones entre los elementos de contenido y los grupos. Una vez determinadas las categorías básicas de información, el diseñador debe establecer cómo se relacionan unas con otras, y construir una estructura que refleje apropiadamente estas circunstancias. En un sistema de información, esta estructura podría ser jerárquica, de hipertexto o estilo base de datos.
  • Examinaremos seguidamente las diversas alternativas para cada uno de esos componentes centrales.

    2.1 Esquemas organizacionales

    Se dividen en esquemas exactos o ambiguos.

    2.1.1 Esquemas exactos

    Se caracterizan por dividir la información en secciones bien definidas y mutuamente excluyentes. En otras palabras, partiendo de un criterio de clasificación definido, cada dato almacenado en el sistema tiene su ubicación precisa y unívoca. Se elimina toda ambivalencia, de manera que la búsqueda posterior que se haga de una pieza de información cualquiera conducirá a un resultado único e inconfundible. [2]

    Algunos ejemplos de criterios selectivos que conducen a esquemas organizacionales exactos son: el alfabético, el cronológico y el geográfico. Veamos de qué manera pueden resultar de interés para un sistema de información jurídica.

    2.1.1.1 Alfabéticos

    En la vida diaria, encontramos multitud de esquemas exactos alfabéticos a nuestro alrededor. El directorio telefónico es un buen ejemplo. Todas las piezas de información dentro de él tienen una ubicación precisa y unívoca, en función de la posición que tienen a partir del orden de las letras del alfabeto. No se esperaría que una persona de apellido Rojas aparezca junto a aquellas cuyo apellido comienza con "m". Las enciclopedias temáticas brindan otro caso ilustrativo.

    En derecho, podemos visualizar fácilmente la utilidad de emplear un esquema alfabético para el diseño de un sistema de información. Típicamente, los diccionarios jurídicos tendrán esa organización, así como muchos índices temáticos. De particular interés para la informática jurídica, los tesauros jurídicos tenderán a seguir un esquema alfabético. [3]

    2.1.1.2 Cronológicos

    La secuencia temporal es el criterio organizacional en estos casos. La información se agrupa en función de su cronología. En la vida diaria, este esquema se traduce en textos de historia, archivos de boletines de prensa, guías de televisión, etc.

    En el plano de lo jurídico, se puede catalogar la información fácilmente a partir de este factor: las colecciones de normativa y de jurisprudencia frecuentemente lo siguen. Esto es natural, ya que la interpretación histórica es una herramienta fundamental de hermenéutica jurídica. Y, desde luego, el principio general de que la ley posterior deroga a la anterior hace que la perspectiva cronológica resulte crucial para los operadores jurídicos.

    2.1.1.3 Geográficos

    La información puede organizarse también, de manera exacta, con base en un factor geográfico de origen (país, región, etc.). Alrededor nuestro vemos mapas, cartas meteorológicas o topológicas, estadísticas de población y mil otras formas de representar datos en función del territorio.

    Para el derecho, que dota a la jurisdicción territorial de una importancia de primer orden, el esquema exacto geográfico permite resolver problemas de soberanías...

    Para continuar leyendo

    Solicita tu prueba

    VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR