Consecuencias penales de los delitos de conducción sin licencia cometidos por menores de edad en Reino Unido
| Autor | Cristina Callejón Hernández |
| Cargo del Autor | Contratada Predoctoral FPU de la Universidad de Jaén |
| Páginas | 373-410 |
Capítulo décimo séptimo
Consecuencias penales
de los delitos de conducción sin licencia
cometidos por menores de edad en Reino Unido
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Contratada Predoctoral FPU de la Universidad de Jaén
SUMARIO: I. Introducción. II. Figuras delictivas relacionadas con el ejercicio del derecho
de conducir sin la licencia adecuada: 1. Cuestiones previas acerca de los permisos
de conducir en Reino Unido. 2. Conducción sin licencia 3. Conducción sin licencia con
resultado de muerte 4. Sanciones fijas. 5. Inhabilitación para el ejercicio del derecho a
conducir vehículos a motor. III. Sistema de justicia penal juvenil en Reino Unido:
1. Principios que inspiran la justicia penal juvenil inglesa. 2. Proceso judicial de menores.
3. Posibles penas a imponer a un menor de edad. 4. Directrices judiciales específicas en mate-
ria de justicia penal juvenil. IV. Análisis De Un Caso Concreto: Julia Smith v Andrew
Alexander William Riozzie ([2013] EWCA Crim 2669). V. Conclusiones.
I. INTRODUCCIÓN
El artículo 384 del Código Penal español castiga la conducta de conducción
sin la oportuna licencia con una pena alternativa de prisión, multa o trabajos en
beneficio de la comunidad. Cuando dicha conducta es realizada por un menor de
edad, la imposición de una pena deviene imposible y en su lugar se aplicará una
medida, debiendo derivarse el asunto a la Ley Orgánica de Responsabilidad Penal
de los Menores (LORPM).
Pues bien, en Reino Unido también existe un sistema dual en el que se dis-
tingue la justicia de adultos de la justicia penal juvenil, entendiéndose que ambas
justicias se ven presididas por principios diferentes, caracterizándose la primera
por ser de corte punitivo y la segunda de corte educativo.
Paralelamente a lo que ocurre en Derecho penal español, las conductas delic-
tivas son iguales para menores y adultos. En este sentido, en el sistema jurídico-pe-
nal patrio, para saber si un menor de edad ha cometido una acción considerada
como delito, debemos acudir al mismo Código Penal de adultos y comprobar si
aquella puede encuadrarse en el correspondiente tipo de injusto, con indepen-
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dencia de que posteriormente acudamos a la LORPM en busca de una sanción
adecuada. Del mismo modo y en ausencia de un Código Penal, en Reino Unido
existen innumerables leyes penales, diseminadas por todo el Ordenamiento jurí-
dico británico, cada una de las cuales dictamina diferentes conductas delictivas
en una materia concreta y, en el caso de ser perpetradas por menores de edad, la
sanción aplicable no será la misma que para el caso de un adulto, sino que existe
un conjunto de penas específicas para menores de edad, orientadas a su reeduca-
ción. Y me refiero a penas porque el sistema jurídico anglosajón no realiza distin-
ción alguna en cuanto a la terminología relativa a las sanciones correspondientes
a actuaciones delictivas cometidas por adultos o menores, en ambos casos aluden
a “penas”. El sistema jurídico-penal español, en consonancia con la gravedad im-
plícita en el vocablo “pena”, ha preferido referirse a las sanciones de justicia penal
juvenil con el término “medidas”.
La estructura del presente estudio se compone de dos bloques fundamenta-
les: en el primero de ellos, se realizará un análisis acerca del delito de conducción
sin licencia con resultado de muerte y de la figura de conducción sin licencia; y
en el segundo, se aportará una visión sobre el sistema penal juvenil de Inglaterra
y Gales al objeto de señalar las principales sanciones que pueden imponerse a
menores de edad.
II. FIGURAS DELICTIVAS RELACIONADAS CON EL EJERCICIO DEL
DERECHO DE CONDUCIR SIN LA LICENCIA ADECUADA
1. Cuestiones previas acerca de los permisos de conducir en Reino Unido
En un informe del año 2005 relativo a delitos de malos hábitos de conduc-
ción, el Gobierno británico mostró su preocupación no solo acerca de los mis-
mos, sino también acerca de los problemas que genera la conducción ilegal. Los
tres delitos de esta materia que le inquietaban pasaban por ser el de conduc-
ción bajo inhabilitación, conducción sin la apropiada licencia y conducción sin
seguro 1.
Esta precisión obedece a la distinción entre conducción bajo inhabilitación
y conducción sin licencia, términos que pudieran inducir a confusión aunque
engloban realidades bien distintas. La primera figura (conducción bajo inhabi-
litación) tiene lugar en el momento en que una persona que poseía una licen-
cia válida para conducir es posteriormente inhabilitada para llevar a cabo tal
actividad.
A diferencia del sistema español, en el que el conductor pierde su licencia
en consonancia con la pérdida de todos los puntos de su carné de conducir, en
Reino Unido la licencia se pierde cuando se alcanzan doce puntos, que se irán
1 CUNNINGHAM, S., Driving offences. Law, Policy and Practice, Routledge, Bodmin
(Cornualles), 2008, pp. 113-115.
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imponiendo con cada infracción. Una vez que el ciudadano alcanza el total de
doce puntos es inhabilitado y el riesgo de conducir en situación de inhabilita-
ción implica la posibilidad de ser sancionado por conducción bajo inhabilita-
ción, una conducta que se considera de mayor gravedad que la de conducción
sin licencia.
Por su parte, la segunda conducta (conducción sin licencia) se refiere a la
persona que ejercita la actividad de conducción sin ostentar licencia alguna, ya
sea porque nunca la obtuvo o bien porque aún no ha alcanzado la edad necesaria
para optar a ella.
A propósito de las licencias, los aprendices británicos deben por-
tar la correspondiente licencia provisional que les faculta para conducir.
Normalmente, dichas licencias provisionales suelen durar hasta el decimosép-
timo cumpleaños del aprendiz y deben ser renovadas cada tres años, con ex-
cepción de motocicletas y ciclomotores, que serán renovadas bianualmente.
Un sujeto con licencia provisional debe conducir siempre bajo la supervisión
de un conductor cualificado y debe asegurarse de llevar la placa con la “L” o la
“D” en el caso de Gales. Si una persona conduce sin supervisión y/o sin la pla-
ca comete una infracción de conducción sin licencia al amparo de la sección
87 de la Ley de Tráfico 2.
A la idea de que un supervisor debe ser un conductor cualificado debe aña-
dirse el propio concepto de “conductor cualificado”, que se define generalmente
como una persona de al menos 21 años, con una licencia de conducir relevante
y una experiencia significativa como conductor [sección 17 de la Regulación de
Vehículos a Motor (Permisos de Conducir) de 1999]. Un permiso de conducir
importante es una licencia completa que autoriza para conducir un vehículo de
la misma clase que está conduciendo el conductor con licencia provisional; y una
experiencia significativa implica que el sujeto ha adquirido tal permiso como mí-
nimo tres años antes de actuar como supervisor 3.
La sección 101 de la Ley de Tráfico de 1988 indica que no puede obtenerse
la licencia para conducir hasta no alcanzarse la edad mínima contemplada para
cada tipo de vehículo. A continuación se aporta una tabla ilustrativa con las distin-
tas edades que deben alcanzarse para adquirir la licencia de las distintas clases de
vehículos 4:
2 COOPER, S. y ORME, M. Road Traffic Law, Oxford University Press, 2ª ed., 2009, p. 90.
3 COOPER, S. y ORME, M. “Road Traffic…”, ob. cit., p. 90.
4 A pesar de que la tabla puede encontrarse en la Ley de Tráfico (sección 101), las de-
finiciones y datos correspondientes a cada tipo de vehículo se localizan en la sección 9 de la
Regulación de Vehículos a Motor (Permisos de Conducir).
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