Complejo de ocio y aventura «Meseta-Ski» en monte quemado y reforestado. Tordesillas (Valladolid)

AutorAntonio Ramos Medrano, Jose - Ramos Díez, Francisco Javier
Cargo del AutorLicenciado en Ciencias Ambientales
Páginas157-161

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ASUNTO: Complejo de ocio y aventura «Meseta-Ski» en monte quemado y reforestado. Tordesillas (Valladolid)

SENTENCIAS: STSJ de Castilla y León de 19 de abril de 2009, de 28 de mayo de 2009 y 20 de octubre de 2010. Auto del Juzgado de lo Contencioso Administrativo n.º 2 de Valladolid de 4 de febrero de 2011

RECURRENTE: Ecologistas en Acción de Valladolid

El proyecto de ocio y aventura que se pretende implantar en un cerro próximo a la localidad vallisoletana de Tordesillas se va a convertir sin duda en uno de los hitos más importantes de la defensa de la legislación medioambiental, frente a los deseos de la Administración de impulsar las actividades que fomentan la creación de riqueza y de puestos de trabajo en las zonas rurales, al margen del emplazamiento elegido para ello, toda vez que en este caso concreto el cerro en que se pretende ubicar el complejo de ocio y aventura es un monte que sufrió un incendio en el año 1999 y fue posteriormente reforestado lo que motivó las criticas de las asociaciones ecologistas, y especialmente la asociación ecologistas en acción, que ha ido impugnando (y ganando) todas los acuerdos que se iban aprobando1.

El proyecto arranca en el año 2006, a impulsos de la Diputación Provincial de Valladolid, a través de la empresa Sodeva, s.a. (Sociedad de Desarrollo de Valladolid) con un presupuesto inicial de 4 millones de euros, en su totalidad público, que se ha ido incrementando hasta los 12 millones de euros y que, si al final hay que demoler lo construido, ascenderá a un coste mayor.

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El complejo de ocio y multiaventura constaría de dos pistas de esquí seco, pista de hielo, campamento infantil, parque de aventuras, rutas a caballo, descenso en mountain bike, rocódromo, un edificio de 800 m2para cafe-tería-restaurante y servicios administrativos y una zona de aparcamiento para 100 vehículos. Al tratarse de una actuación totalmente pública contaba con el apoyo de las distintas administraciones ( Junta de Castilla y León, Diputación de Valladolid y Ayuntamiento de Tordesillas) así como de los partidos políticos mayoritarios, dada la creación de riqueza y empleo que llevaría consigo esta actuación a implantar en una zona rural.

El talón de Aquiles de este proyecto es el emplazamiento elegido, la zona de monte «Eriales de Tordesillas y Anejos», que había sufrido un incendio en el año 1999, en el que se quemaron la totalidad de los 8.218 pinos de este cerro que fue reforestado de forma inmediata por lo que disponía de arbolado de entre 5 y 7 años de edad. De esta forma, la actuación que se proyecta sobre este monte es claramente incompatible con el carácter forestal del terreno elegido. Además, no se trata solo de que el Plan General de Tordesillas calificara esta zona de protección natural forestal y paisajística, lo que ya de por sí hacía inviable la actuación, sino que uno de los mayores logros del movimiento ecologista había sido la reforma de la Ley de Montes que, siguiendo el ejemplo de otros países mediterráneos como Italia y Portugal, impide la reclasificación de los montes que han sufrido...

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