La calle y el voto: desconfianza política, protesta y elecciones en Brasil
| Autor | Maria Hermínia Tavares de Almeida |
| Páginas | 255-266 |
LA CALLE Y EL VOTO: DESCONFIANZA
POLÍTICA, PROTESTA Y ELECCIONES EN BRASIL
Maria Hermínia Tavares de aLmeida
En octubre de 2014, los brasileiros votaron por séptima vez para elegir pre-
sidente desde que la democracia reemplazó al régimen autoritario (1964-1985).
En segunda vuelta, la presidenta Dilma Rousseff, del Partido de los Trabajadores
(PT), venció a su competidor Aécio Neves, candidato del Partido de la Social
Democracia Brasileña (PSDB), por un escaso 3,26 %, al obtener el 51,64 % de
los votos. Este apretado resultado garantizó al PT seguir dirigiendo el Ejecutivo
federal, en el que se había instalado en 2003.
Los resultados electorales reiteraron la disputa electoral centrípeta que se
venía repitiendo desde la segunda elección presidencial, en 1994, y que oponía la
coalición de centro-izquierda, organizada en torno al PT, a la coalición de centro-
derecha, encabezada por el PSDB. Visto en perspectiva, se trataba de un juego
electoral conocido, con un resultado hasta cierto punto esperable. Sin embargo,
a menos de un mes de la primera vuelta, la incertidumbre era grande, y no fueron
pocos los que previeron un cambio en los términos de la competencia, con un
retroceso del PSDB y el ascenso de una nueva fuerza catapultada por el patente
descontento ciudadano con las instituciones políticas, en general, y los partidos
dominantes, en particular.
Este artículo describe el proceso por el cual las instituciones políticas han
predominado sobre los impulsos de cambio claramente existentes en la socie-
dad. Sostenemos que no hay una vía directa que conecte las calles con la arena
electoral. La desconfianza y el descontento ciudadanos tienen que encontrar una
traducción en términos de alternativa electoral creíble, es decir, percibida como
viable y superior a las ofertadas por los partidos existentes. En general, algunos
ciudadanos pueden arriesgarse a afrontar los azares de las manifestaciones calleje-
ras, pero la mayoría de los electores calcula de otra forma el riesgo de apostar por
quienes podrán beneficiarlos o perjudicarlos durante los próximos cuatro años.
En el caso presente, la tercera fuerza, que tenía la pretensión de romper la
competencia estructurada en torno al PT y al PSDB, no logró afirmarse como
DESAFECCION.indb 255 10/11/15 17:38
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba